El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anunció ayer un ambicioso paquete de ayudas destinado a paliar los efectos de la sequía, especialmente en la provincia de Albacete.
Page lanzó hizo este anuncio tras la exclusión de Albacete de las ayudas que prepara el Ministerio de Agricultura. Durante la clausura del Congreso de UPA en Toledo, García-Page expresó su descontento con el ministro de Agricultura, Luis Planas, a quien calificó irónicamente como «buen tío» y «de lo mejorcito que hay en el Gobierno».
Sin embargo, el presidente regional no dudó en señalar la injusticia cometida al dejar sin apoyo a las comarcas y pueblos afectados por la sequía en Castilla-La Mancha. «Son injustos con nosotros en las ayudas. No pueden quedarse las comarcas y los pueblos afectados sin las ayudas del Estado», declaró García-Page.
Ante esta situación, el Gobierno regional tomará cartas en el asunto y aprobará, en los próximos 10-15 días, un paquete «muy importante» de ayudas dirigidas principalmente a la provincia de Albacete. También manifestó su esperanza de que el Ministerio rectifique su decisión, aunque reconoció que podría ser complicado incluir a todas las comarcas afectadas.
«No pasa absolutamente nada porque, si no, se lo vamos a recordar muy a menudo», advirtió el presidente ante los delegados del congreso de UPA.