Fiscalía mantiene su petición de prisión permanente revisable

Josechu Guillamón
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Tanto el Ministerio Público como la acusación particular consideran probado que el acusado agredió sexualmente a su amigo y cometió un asesinato con alevosía, al matarlo a pedradas

Imagen del acusado (a la izquierda), en un instante del juicio, junto al traductor. - Foto: EFE

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial acogió ayer la quinta sesión del juicio contra un hombre acusado de violar y matar a un amigo, en la caseta de la luz en la que residía, el 26 de enero de 2022.

Durante la vista, se escucharon las conclusiones de Fiscalía, acusación particular y defensa que mantuvieron, casi en su totalidad, sus peticiones iniciales.

La primera intervención fue la de la fiscal, quien mantuvo su petición de 12 años de prisión para el acusado por el delito de agresión sexual y la  de prisión permanente revisable por el de asesinato con alevosía. El único cambio es que no pidió indemnización para el hijo de la víctima, puesto que se desconoce su identidad y su paradero.

Delitos probados. La fiscal aseguró que si mantenía su petición de prisión era «porque las pruebas han confirmado mi postura inicial». «Estamos convencidos de que el acusado es culpable».

En este sentido, recordó que nadie duda que el acusado violó y mató a la víctima, porque él mismo lo reconoció en el juicio. Sin embargo, aunque el procesado dijo que no tenía intención de matar, con lo que estaríamos ante un caso de homicidio imprudente y no de asesinato, la fiscal manifestó que el procesado dijo eso para tener la menor pena posible. «Para la Fiscalía es evidente que tenía intención de matar y hay datos objetivos como el instrumento que utilizó (piedras de grandes dimensiones) o el lugar donde da el golpe (la cabeza). Dirige  golpes certeros a la cabeza, en varias ocasiones».

En este sentido, también señaló que no lanzó la piedra sin saber donde lo hacía porque estaba a oscuras, sino que lo hizo sabiendo donde daba, porque todos los golpes fueron a la cabeza. También señaló que la alevosía estaba clara, porque el acusado se marchó y esperó a que su amigo  estuviera dormido, para golpearlo, violarlo y matarlo, actuando de forma «sorpresiva e inesperada». «Es un ataque cobarde, se garantizó que la víctima no pudiera defenderse».  Además señaló que no actuó por un arrebato, ni de forma impulsiva porque se fue dos horas de la caseta esperando a que su víctima durmiera.

La acusación particular también  mantuvo su petición inicial, que en este caso era de 15 años de cárcel por el delito de agresión sexual y de prisión permanente por el de asesinato.

 Además hizo suyas las afirmaciones realizadas por la fiscal.

En la jornada de hoy está previsto que se entregue el objeto del veredicto a los miembros del jurado, para que comiencen a deliberar. Se trata de una serie de preguntas elaboradas por las acusaciones y la defensa, para que los jurados decidan no sólo si el procesado es inocente o culpable, sino también para que establezcan como ocurrieron los hechos o si es merecedor de algún atenuante.

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