El Consistorio activa Plan Emergencias por las tormentas

Redacción
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están alertados todos los servicios municipales y en especial los de la Policía Local, Protección Civil, Extinción de Incendios y Salvamento, Medio Ambiente, Infraestructuras y Movilidad Urbana, Acción Social, Arquitectura y Obras

Fotografía de archivo de lluvia en la capital. - Foto: Víctor Fernández

Con motivo de la activación del Meteocam en su fase de alerta para toda Castilla-La Mancha por fuertes lluvias y fenómenos tormentosos y ante las informaciones recibidas a este respecto desde la Base Aérea de los Llanos y las recomendaciones del Servicio de Seguridad, el Ayuntamiento de Albacete activará el Plan Territorial de Emergencias Municipal (Platemun), en fase de alerta, a partir de las 23:00 horas de hoy y hasta la finalización del episodio de fenómenos meteorológicos adversos.

Concretamente, la alerta de nivel naranja emitida por la Agencia Estatal de Meteorología Aemet prevé hasta 70 litros/m2 en una hora en la mancha albaceteña.

El Platemun es una herramienta que tiene entre sus objetivos coordinar la actuación de los recursos materiales del Ayuntamiento, reducir los derivados de las fuertes lluvias previstas y garantizar la protección ciudadana.

En estos momentos, y como medida preventiva, ya están alertados todos los servicios municipales y en especial los de la Policía Local, Voluntarios de Protección Civil, Extinción de Incendios y Salvamento, así como Medio Ambiente, Infraestructuras y Movilidad Urbana, Acción Social, Arquitectura y Obras, los cuales irán adecuando sus recursos y desplegándose en función de la evolución de los acontecimientos.

Ante las fuertes lluvias y tormentas, desde el Ayuntamiento de Albacete se recomienda a los ciudadanos extremar las precauciones para evitar incidentes no deseados, como por ejemplo no utilizar el vehículo y, en caso de hacerlo, reducir al máximo la velocidad, ya que la lluvia disminuye la visibilidad y aumenta el tiempo de frenado; retirar elementos exteriores de las vivienda que puedan ser arrastrados por el agua; abandonar sótanos y plantas bajas en caso de inundación; alejarse de postes eléctricos, árboles, objetos metálicos y vallados; cerrar puertas y ventanas en las viviendas y desenchufar los electrodomésticos.