Carlos Javier Navarro García nació en Albacete hace 39 años y es capitán del Ejército del Aire. Aunque los militares del Ala 14 ya han regresado hace días del ejercicio Pacific Skies, que les ha llevado a dar la vuelta al mundo, él continúa en la expedición, puesto que actualmente está destinado en la Dirección de Asuntos Económicos del Ejército del Aire y del Espacio, lo que le ha llevado a trabajar de lleno en la organización y planificación de esta aventura. 

¿Por qué decidió ser militar?

Mi sueño siempre fue ser militar, desde pequeño; no creo que exista mejor forma de servir a España que siendo militar. El mayor honor (y responsabilidad) es ser oficial del Ejército del Aire y del Espacio.

¿Tiene algún antecedente militar en la familia?, ¿su ingreso en el Ejército fue totalmente vocacional?

Tengo varios familiares militares, de los tres Ejércitos. Sin duda, el ser militar es completamente vocacional, el hecho de tener familiares militares hace que esa vocación se incrementa.

¿Cómo llegó a la Dirección de Asuntos Económicos?, ¿entró en el ejército tras estudiar otra carrera? 

Para formar parte del Cuerpo de Intendencia, como requisito previo, es necesario tener una carrera universitaria (principalmente, Economía, ADE o Derecho) y, posteriormente, pasar un proceso selectivo que consta de pruebas teóricas (más de 100 temas), pruebas físicas e inglés. Una vez superado dicho proceso, nos incorporamos a la Academia General del Aire durante dos años. 

La Dirección de Asuntos Económicos se encuentra en el Cuartel General de Madrid. Escogí ese destino por dos motivos: el primero, por su cercanía y buena comunicación con Albacete; y, segundo, por un teniente coronel que fue profesor mío y estaba destinado en dicha Dirección, al que tengo como referente profesional y personal. 

¿Fue difícil adaptarse a la vida militar? 

Los militares somos referente para muchas personas, y defendemos y representamos a España fuera de nuestras fronteras. Para que todo funcione correctamente es necesario que existan una serie de normas que regulen nuestra actuación y comportamiento. Dentro de la rigidez de dichas normas, siempre es fácil adaptarse gracias a los compañeros, que son el mejor activo que tienen nuestras Fuerzas Armadas. Gracias a ellos, y sobre todo a nuestras familias, que son nuestro mejor apoyo, incondicional. Cuando uno hace lo que más le gusta, todo es increíblemente fácil y gratificante. 

¿Cuál ha sido su cometido en el Pacific Skies?

Mi cometido en el Pacific Skies 2024 se puede dividir en tres etapas. La primera sería una etapa inicial de planeamiento desde septiembre de 2023. Una segunda etapa de reconocimiento de los países en los que íbamos a hacer escala o desarrollar algún tipo de ejercicio y la tercera parte es de ejecución de los propios ejercicios y del propio Pacific Skies. Básicamente he hecho labores de intendencia, que es darle soporte y solución a las necesidades logísticas y life support; es decir, a las necesidades de la vida diaria del personal destacado ya sea mediante la contratación, tema de pagos, dar soluciones de seguridad en algunos aspectos, trámites aduaneros y otro tipo de gestiones, dentro del desarrollo del Pacific Skies. 

Imagino que su labor es muy importante para la vida diaria de los militares desplazados. 

La función principal del Cuerpo de Intendencia en las operaciones y ejercicios en el exterior es la de actuar como órgano de contratación, de modo que las necesidades de las distintas unidades participantes sean satisfechas de la manera más eficiente y eficaz. Es una labor que requiere una perfecta coordinación entre las unidades participantes, el Mando Aéreo de Combate (Macom) y el Mando de Personal (Maper). Para que las operaciones sean desarrolladas de manera satisfactoria es necesario que todo el personal tenga las mejores condiciones posibles en función del presupuesto disponible, debiendo velar por unas condiciones dignas, con los mayores estándares de seguridad. 

¿Cuántos países del Pacific Skies ha visitado?, ¿cuántas veces?

El Pacific Skies se compone, a su vez, de tres ejercicios desarrollados en Alaska (Arctic Defender), Australia (Pitch Black) y Tarang Shakti (India) pero para llegar a cada uno de esos países, es necesario hacer escala en Canadá, Japón, Malasia y Emiratos Árabes Unidos. He estado en todos los países en los que se desarrolla el ejercicio, a excepción de Canadá, bien durante la fase de planeamiento (reconocimiento in situ de los países, es lo que se conoce como Site Survey) o en la fase de ejecución. En Australia o la India, repito visita. 

Durante este ejercicio hemos participado seis oficiales del Cuerpo de Intendencia del Ejército del Aire y del Espacio, dos nos hemos encargado de la ejecución de los ejercicios y otros cuatro de las distintas escalas, así como el resto de personal destinado en la Dirección de Asuntos Económicos que nos apoyan desde territorio nacional.

¿Qué gestiones le han ocasionado más problemas?

Una de las principales dificultades es la contratación de los alojamientos del personal desplegado, así como los movimientos internos desde la zona de vida hasta las bases, pues deben reunir unos requisitos de seguridad. 

¿Algún país le ha ocasionado más problemas? 

En general todos los países han sido muy receptivos y colaborativos, pero, por razones operativas, el país más complicado para trabajar es India. 

¿Por qué la India ha sido el país más complicado a nivel de organización que ha visitado en el Pacific Skies?

India es un país con unas costumbres y una organización completamente distinta a la que tenemos los países occidentales. Debemos adaptarnos a sus requerimientos y al exceso de burocracia pero sí que es cierto que su predisposición es absoluta. El Ejército del Aire está acostumbrado a realizar misiones y ejercicios en países del entorno no OTAN (como Senegal o Yibuti) por lo que tenemos la experiencia y flexibilidad suficiente para conseguir los objetivos perseguidos. 

Ahora se encuentra de nuevo en la India.

El día 3 de agosto nos desplazamos un equipo avanzado de cinco personas para preparar la llegada de las aeronaves y personal que tendrá lugar los días 13 y 14 de agosto (procedentes de Malasia). 

 La ejecución de la siguiente parada o ejercicio comienza una vez que se ha encauzado la ejecución del salto anterior. En la mayoría de los casos se dispone de muy poco tiempo, unos 3 o 4 días desde que se llega a la zona de operaciones, para ejecutar lo planificado para el despliegue inicial; a su vez, antes de iniciar el despliegue en el siguiente país, se debe coordinar el repliegue.

Son viajes de muchas horas de viaje así como escalas que permiten ir avanzando en la planificación e intentar controlar las posibles incidencias que puedan surgir, en base a la evolución de las operaciones. 

¿Qué ha supuesto para usted participar en el Pacific Skies?

El Pacific Skies ha supuesto un reto personal y profesional; hasta este momento, tanto las Operaciones de Mantenimiento de la Paz (OMP) como los ejercicios en los que participa el Ejército del Aire y del Espacio, se desarrollaban en un país concreto. 

El Pacific Skies combina tanto una parte expedicionaria como la ejecución de ejercicios, en países en los que nunca habíamos estado, el reto es máximo. El hecho de participar en el planeamiento y la ejecución, muestra de la confianza depositada por mis mandos, es un motivo de orgullo y hace que el esfuerzo y desempeño de las tareas a realizar se multipliquen. Es una experiencia única. 

¿Qué destacaría de cada uno de los países que ha visitado en el Pacific Skies?

 Sin duda el gran respeto y admiración que tienen a los españoles. No hay nada más satisfactorio que llegar a cualquiera de los países y al decir que somos españoles, nos ponen las cosas más fáciles. Uno de los países que más me ha gustado ha sido Australia por todo, la gente es genial y es todo una reserva natural. 

Mi experiencia en Australia es bien distinta a cuando estuve en febrero de este año haciendo el Site survey o reconocimiento de la zona, la verdad es que cambia mucho por el tema de la temperatura, es una temperatura mucho más suave, los parques naturales se pueden visitar mejor, porque el calor en febrero es agobiante y la verdad es que la experiencia aquí es muy enriquecedora. Es una cultura muy distinta, porque a su vez es una mezcla de culturas, es una cultura muy distinta a la española, pero a la vez se parece mucho en muchos aspectos, como la vida en la calle. La verdad es que es un país digno de visitar y sobre todo la gente es excepcional. 

Todos los países tienen algo positivo, el conocer otras formas de trabajar sirve para darte cuenta de las cosas en las que puede mejorar pero, a su vez, de las cosas que el Ejército del Aire y del Espacio hace bien, que son muchas. 

¿Le había tocado realizar más viajes de planificación como éste?

La primera misión la realicé en 2022 en Bezmer (Bulgaria), dentro de la misión de Policía Aérea Reforzada en el Báltico (Destacamento Aerotáctico OREL). La principal complicación del Pacific Skies es que se enlazan la realización de tres ejercicios (Alaska, Australia e India) con las paradas técnicas en Canadá, Japón, Malasia y Emiratos. Sin duda ha sido el más complicado en cuanto a planificación pero, sin duda, una de las mejores experiencias tanto profesional como personal. 

¿Cuándo regresa a España?

Empecé el ejercicio el 25 de junio en Alaska y lo terminaré el 16 de agosto; una vez que todo el personal se vuelva a territorio nacional desde Emiratos, un teniente coronel del Mando Aéreo y Combate (Macom) y yo nos volveremos a España, cerrando el ejercicio. Esto está siendo muy gratificante, pero tengo una boda que preparar, me caso en octubre.