En la mañana de ayer, y en base al artículo 102.2 del Reglamento de Armas que establece la exigencia de superar las pruebas de capacitación que determina el Ministerio del Interior, la Comandancia de la Guardia Civil realizó las pruebas de capacitación para la obtención de las licencias de armas D (armas largas rayadas para caza mayor), E (armas para tiro deportivo y escopetas de caza) y la AEM (Autorización Especial de armas para menores).

Las pruebas, teóricas y prácticas, estuvieron presididas por el Comandante Jefe de Operaciones de la Comandancia de la Guardia Civil de Albacete, contando con la presencia del Jefe de la Intervención de Armas albaceteña y por varios efectivos de esa unidad, que conformaban el Tribunal de capacitación.

El salón de actos del Centro de Recuperación de la Fauna Salvaje de Albacete acogió a los aspirantes que debían superar inicialmente una prueba teórica relativa al conocimiento de las armas y al propio Reglamento de Armas. Para superar el cuestionario de 20 preguntas, tipo test, el aspirante tenía que acertar, al menos, 16 de ellas, disponiendo para ello de un tiempo máximo de 20 minutos.

Estas 20 preguntas estaban extraídas del programa de materias que recoge los conocimientos suficientes para superar la prueba teórica para la obtención de estas licencias y que se encuentra publicado en el ANEXO 1 de la Resolución de 19 de octubre de 1998, de la Dirección General de la Guardia Civil.

Superada la prueba teórica, los aspirantes se trasladaron hasta las instalaciones del Club Albacetense de Tiro de Precisión, sito en el Polígono Industrial Campollano de Albacete, donde el Capitán Jefe de la Intervención de Armas de Albacete les impartió una charla previa sobre las medidas de seguridad a adoptar con las armas, ya no solo durante la prueba práctica, sino para cada vez que durante su vida deportiva tuvieran que hacer uso de un arma de fuego.

Ya en la línea de tiro, cada aspirante tuvo de realizar unas operaciones básicas con una escopeta de caza, como alimentarla, apuntar, disparar a un blanco y por último descargarla, demostrando así su habilidad para el manejo de las armas.

A las pruebas, para la obtención de las licencias de armas D, E y AEM, se presentaron un total de 37 aspirantes de los que resultaron aptos 29 de ellos. Entre los aspirantes se encontraba un buen número de menores de edad, despertando ya desde edades tempranas su afición al deporte cinegético de caza.

Para los que no han resultado aptos y ha sido su primera convocatoria, recordarles que las tasas del examen le dan la opción para presentarse a otras dos convocatorias más sin tener que renovar las tasas y la documentación requerida para tomar parte en estas pruebas.

Una vez que los aprobados tengan en su poder la licencia física podrán hacer uso de las armas de fuego de la categoría correspondiente, debiendo cumplir otra serie de requisitos como ir provistos de un seguro de responsabilidad civil, obtener la licencia de caza de la provincia donde llevará a cabo la actividad, así como contar con la autorización del espacio cinegético.

Los menores de 18 años, a los que les amparará la AEM hasta su mayoría de edad, deberán ir siempre acompañados por un adulto, con licencia de armas en vigor y que se haya responsabilizado previamente de la vigilancia del menor.

Recordar que cada año se fijan seis convocatorias para la obtención de este tipo de licencias de armas, una por cada bimestre, debiendo los interesados acudir con suficiente antelación a la Intervención de Armas de su demarcación al objeto de realizar la correspondiente solicitud para tomar parte en las pruebas. La última convocatoria de este año 2024 para la obtención de estas licencias se celebrará el día 5 de diciembre.