El concejal de Seguridad, Alberto Reina, junto al jefe del Servicio Contra Incendios y de Salvamento, Ismael Pérez, presentaron la memoria estadística de actuaciones realizadas por el servicio municipal de bomberos durante 2023. Un ejercicio en el que esos profesionales sumaron 2.300 actuaciones, con un porcentaje prácticamente parejo entre las de prevención (1.153) y las de extinción y salvamento. Entre estas últimas, el edil destacaba que "han bajado los incendios en edificaciones", mientras que crecieron un 22% los servicios de asistencia a personas, muchas veces personas mayores o con problemas de movilidad que sufren accidentes en sus domicilios y necesitan ayuda. Pérez detallaba al respecto que, mientras que los incendios no tienen una concentración destacable por zonas, estas actuaciones sí se centran "en barrios con los edificios en altura más antiguos y con más problemas de accesibilidad".

Mientras, en materia de incendios, el caso más común fue el fuegos en contenedores y papeleras, con 89 actuaciones, y el pico de actuaciones se dio en agosto. Mientras, en el número global de actuaciones, los meses de mayor actividad fueron enero y noviembre, "que coincideron con temporales de viento, que por suerte no causaron daños personales", pero sí dejaron desperfectos materiales de consideración, según detalló el jefe del Servicio. De hecho, dos de las intervenciones más destacables del pasado año fueron los desprendimientos motivados por las fuertes ráfagas en edificios de la Avenida de la Estación y Arquitecto Vandelvira. 

En cuanto a las actividades de prevención, el servicio sumó, entre otros, 504 cursos y prácticas del personal propio, 361 recorridos urbanos de reconocimientos, 104 revisiones de hidrantes y 78 campañas para formación de personal ajeno.