La huelga del sector primario que tiene lugar en Francia está afectando de manera encarecida a los transportistas de Villarrobledo uno de los sectores económicos más importantes que ha vivido «una semana caótica», según Enrique Jiménez, presidente de la Asociación de Empresas de Transporte de Mercancías en la provincia de Albacete (Atralba), integrada en FEDA.
En las autopistas que pasan por Francia los camiones cargados de frutas y hortalizas y otras mercancías los han vandalizado y descargado y hasta el pasado sábado no pudieron volver a España.
Calcula desde Atralba que son unos 3.000 camiones de Villarrobledo y de la provincia de Albacete los que están afectados con las retenciones y el vandalismo que se está dando en la frontera.
Enrique Jiménez manifestó a La Tribuna que el cálculo estimado de vehículos involucrados en el conflicto es de 20.000 camiones que obligatoriamente tienen que entrar por la frontera de Irún con destino a Francia y el resto de países de Europa.
«Los daños económicos oscilan entre los 10 millones de euros al día y el problema no es lo que vandalizan, es que la fruta y las hortalizas no llegan al mercado y no tienen salida. En España no afecta directamente, es en Francia donde el mercado más importante de frutas y hortalizas está rodeado y no dejan entrar productos, estamos esperando a ver qué pasa».
El presidente de Atralba augura continuidad en el conflicto porque el tráfico está cortado para cualquier mercancía que vaya dirigida a Italia, Francia u Holanda
Respecto a la situación que denuncian y las reivindicaciones que realizan los agricultores franceses Enrique Jiménez reconoció que «los agricultores tienen razón. La agricultura está denostada lo que pasa es que en España no se mueven. Las movilizaciones se están dando ahora en Bélgica y Alemania y venían dándose y continúan en otros países como Rumanía o Hungría».
Es una revolución total en toda Europa y el problema viene de Marruecos afectando al resto de países. Alemania que tiraba del carro no está teniendo fuerza. Francia es mucho más valiente y se agrupa cuando dicen vamos todos a una».
Desde la organización de Atralba preveían que podría ocurrir lo que está pasando, «la gente tiene que ser consciente que el sector primario está en peligro, los costes no se corresponden y todo apunta a que el conflicto se va a extender. El sector hortícola en España está teniendo unas pérdidas que afectan a productores de la región de Murcia y del Levante español. Es una revolución con una solución global complicada», concluyó.
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