Desde el inicio de la catástrofe provocada por la DANA, Cruz Roja no ha dejado de estar y trabajar en las zonas más críticas para dar respuesta a las personas afectadas por la emergencia. En el caso de Albacete, la entidad se centró en los primeros momentos en el territorio de la provincia de Albacete, es decir, en la localidad de Letur, desplazando a la zona afectada por el temporal sus equipos de profesionales de respuesta básica y especializada en emergencias. Finalizada la intervención en Letur, profesionales de la entidad, pero fundamentalmente, voluntarios han venido acudiendo y todavía hoy siguen haciéndolo  a las poblaciones valencianas arrasadas por las fuertes lluvias.

Un total de 86 personas de Cruz Roja en Albacete participaron como voluntarios desde el 29 de octubre, día de la catástrofe, hasta el 7 de noviembre, distribuidos entre distintos grupos de actuación, los llamados equipos de respuesta inmediatas en emergencias (Eries) integrados por profesionales expertos en comunicaciones, albergue y apoyo psicosocial, todo ello bajo la activación y el paraguas de la administración autonómica, en concreto, desde Protección Ciudadana, institución que es la que tiene la competencia de movilizar los recursos necesarios a nivel logístico en una situación de emergencia como la ocurrida el 29 de octubre.

Una de las primeras actuaciones llevadas a cabo por personal de Cruz Roja en Letur fue montar un albergue para personas damnificadas, inicialmente iba a ser para 60 afectados, «pero finalmente esta activación no fue real, porque al tratarse de un pueblo pequeño las personas cuyos inmuebles se vieron afectados por la DANAfueron acogidas por familiares y amigos, pero nos encontramos con una nueva necesidad, y era dar albergue a personas intervinientes, ya que allí llegaron personas del Ejército que necesitaban cobijarse», indicó Eva Callejas, coordinadora provincial de Cruz Roja Albacete.

En paralelo a la zona llegó un equipo de psicólogos para atender a familiares de personas desaparecidas y resto de damnificados por las fuertes lluvias, «pero su labor se amplió a todos los vecinos que vivieron una situación emocional muy complicada y a profesionales que estaban interviniendo, porque también sufrimos ante situaciones tan tristes como las vividas esos días allí», agregó.

Importante fue también la participación del ERIEde apoyo a las comunicaciones entre los profesionales que colaboraban en las tareas de búsqueda y salvamento de desaparecidos y la posterior recuperación de la habitabilidad de las viviendas y espacios comunitarios afectados por la DANA, así como facilitando la comunicación (dando servicio telefónico y de internet) a la población.

Estos equipos contaron además con el apoyo cercano de voluntarios de las poblaciones aledañas, como Elche de la Sierra.

donaciones. En una segunda fase la organización se centra en colaborar en la recuperación de los territorios afectados por la DANA, y en una tercera, que es el fortalecimiento y la resilencia.

«Nosotros nos  ponemos ahora a disposición del Ayuntamiento de Letur y de la Junta de Comunidades porque se están tomando diferentes medidas», agregó Callejas, que puso como ejemplo la ayuda prestada a una vecina de Letur para reflotar su negocio de esteticicien o el reparto de tarjetas monederos entre las personas que lo han perdido todo y se han quedado sin recursos. 

El proyecto de intervención de Cruz Roja a nivel nacional tiene una fecha de duración de tres años, tanto en el caso de Letur como en las poblaciones de Valencia.

Sólo en una semana el personal del equipo psicosocial de Cruz Roja realizó con las personas afectadas por la DANA en Letur hasta 153 intervenciones.

Antes de terminar la participación de personal de Cruz Roja en Letur se desplegó un ERIE de comunicaciones, con personal especializado de Albacete (14 personas) en localidades de Valencia. En paralelo voluntarios de Albacete, hasta un total de 46 de la provincia, han colaborado en las tareas de limpieza y de apoyo a los equipos de voluntarios que a diario se movilizan que son en torno a 500, en turnos de una semana de duración.

Si importantes son las manos que ayudan tanto en los primeros momentos de la emergencia como después en las siguientes fases, no lo es menos, la ayuda económica recogida por la ONG para cubrir las necesidades de los damnificados de la DANA, que a nivel nacional ya supera los 100 millones de euros, cantidad de la que la solidaridad albacetense también ha aportado su granito de arena. Sólo de particulares y empresas  las donaciones contabilizadas por Cruz Roja en Albacete supera los 82.000 euros, sin contar la ayuda económica comprometida por el Ayuntamiento de la capital de 50.000 euros que todavía no han sido consignados en las cuentas de la entidad.

En los 82.000 euros de fondos recaudados por la organización en Albacete se incluye generosas cantidades como 35.000 euros de Globalcaja, 17.500 de la empresa Vidrala, 3.500 del Ayuntamiento de Caudete, 7.500 euros del IMD. A todos ellos, Cruz Roja da las gracias.