El Albacete se ha propuesto terminar el año con la flecha hacia arriba, como le gusta decir al técnico. El conjunto de Rubén Albés ha pasado de tener solo buenas sensaciones a acompañarlas con buenos resultados, encadenado una serie de partidos con los que ha logrado acercarse a los números que por estar fechas tenía la temporada pasada.
La irregularidad de los primeros meses parece haber quedado atrás y el equipo tiene 24 puntos, solo dos menos que en la jornada 19 de la temporada en la que terminó disputando los playoff de ascenso. En las últimas siete jornadas solo perdió una y lo hizo de aquella manera en un partido para la historia frente al Racing de Ferrol que acabó 5-4 y en el que mereció sumar tras jugar unos 70 minutos con un hombre menos. A eso se le han unido las dos victorias en casa, frente a Zaragoza y Villarreal B, para generar un clima de confianza con el que se quiere mejorar la puntuación que se ha obtenido hasta el momento lejos del Carlos Belmonte, donde solo han sido capaces de ganar un partido, en Alcorcón (1-2). Solo seis puntos en nueve partidos ha podido sumar el equipo de Albés como visitante y los ánimos están en todo lo alto para asaltar Anduva y afrontar el último partido de la primera vuelta, el próximo martes en casa frente al Eldense, superando la mitad de los puntos que se estiman como necesarios para conseguir la permanencia, primer gran objetivo del Albacete, como no puede ser de otra manera.

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