El concejal de Economía en el Ayuntamiento de Hellín, Pedro García Sequero, y el alcalde, Manuel Serena, ofrecieron una rueda de prensa en referencia a la «subida del recibo del agua obligada por la Junta,  la denominada cuota fija canon DMA, que los hellineros ya están soportando en su última factura del agua».

La cuota fija canon DMA es «el canon del agua,  el nuevo impuesto del Gobierno de Castilla-La Mancha de Emiliano García-Page» explicó Sequero, quien no sólo no quiso desmentir «el alegato de defensa que los socialistas regionales y locales han hecho del nuevo impuesto», sino que también aseguró que «no es una directiva europea, sino que es un impuesto autonómico  pero que, no obstante,  no todas las comunidades autónomas lo cobran». Además precisó que «no es el más barato de España,  puesto que han impuesto un mínimo fijo que supone más del 70% de la recaudación».

Así, explicó, «una familia de dos miembros pagará 24 euros más al año, una de tres  miembros 29 euros más y una de cuatro  miembros 40 euros más», para añadir a continuación que «por si fuera poco, el ciudadano se verá golpeado por duplicado porque el impuesto también tendrá un impacto en las cuentas del Ayuntamiento que deberá pagar por su propio consumo de agua, así como  asumir las pérdidas en las redes de distribución,  cargar con los impagos de los recibos menores a 60 euros, y afrontar un cuatro por ciento extra en costes de gestión».

«El impuesto de la Junta recaudará 765.500 euros anuales del municipio, de los que 574.125 irán directamente a Toledo, sin repercutir en Hellín» apuntó el concejal hellinero de Economía, para terminar asegurando que «con el canon del agua, el presidente García-Page le mete la mano al bolsillo de cada hellinero y al Ayuntamiento».

Por su parte, el alcalde Manuel Serena, que mostró su factura particular y en la que ha asumido un canon de seis euros, mostró igualmente su disconformidad con el nuevo impuesto porque «no sólo no va a suponer una mejora para los hellineros, sino  que no penaliza el despilfarro, sino que castiga a todos por igual». 

Finalmente, el primer edil puso ejemplos  de pequeñas empresas y comercios del municipio, que precisan grandes consumos de agua, «a los que, dijo, el canon castigará con miles de euros al año».