Cinco derrotas y un empate:ese es el pobre balance del Real Madrid este curso ante sus rivales históricos en todas las competiciones. Unos números casi inexplicables para un equipo que siempre fue fiable frente a sus 'semejantes', pero que esta temporada ha perdido la personalidad y la magia que le ha permitido superarlos. 
Los blancos solo han vivido una noche 'mágica' que permitió recordar ese Madrid intratable que, por ejemplo, el pasado curso sumó un nuevo doblete Liga-Champions. Fue ante el Dortmund, cierto que un rival 'relativamente histórico', después de una primera parte esperpéntica (0-2 ganaban los alemanes al descanso) y una gran remontada que llevó el marcador a un estupendo 5-2. Y sí, el Madrid ha ganado 20 de los 30 partidos oficiales del curso... pero a la hora de la verdad ha tropezado una y otra vez. 

LIGA

El cuadro de Ancelotti ha sido incapaz de ganar a ninguno de los primeros clasificados del campeonato. La primera gran cita (jornada ocho) le midió al Atlético en el Metropolitano. Dominaba con relativa comodidad pero con un marcador exiguo (0-1) hasta que Correa le castigó en el minuto 95. El 1-1 supuso el tercer empate liguero del Madrid, que ya había sumado el mismo resultado ante Mallorca y Las Palmas. 
El 26 de octubre llegó la primera gran debacle. El Barça visitaba el Bernabéu como líder casi intratable y la línea adelantada de Flick ponía a prueba la pareja que había llegado a dominarlo todo:Vinicius-Mbappé. El 0-4 final dejó muy tocado a Ancelotti, incapaz de encontrar soluciones tácticas durante los 90 minutos. Y el 4 de diciembre, en el partido adelantado de la 19ª jornada, la visita a San Mamés conllevó una nueva derrota. Al equipo le faltó personalidad para enfrentarse a un Athletic en racha, el delantero francés tocó fondo (fallando un penalti que hubiera supuesto el 2-1) y un error de Valverde, alabado por su tremendo esfuerzo y criticado porque no da la talla 'como Kroos' en el mediocampo, supuso el 2-1 definitivo. 

Champions

El cambio del formato de la competición enganchó al campeón con el pie cambiado. La habitual fiabilidad de los blancos en la Liga de Campeones (15 títulos) se ha tambaleado con fuerza por primera vez en muchos años:a estas alturas (seis partidos) suman tres victorias y tres derrotas. Así como la primera de ellas puede ser calificada de «accidente» (el 1-0 encajado en el campo del Lille), las otras dos reflejan ese bajón ante los grandes. 
El 5 de noviembre, el Milan asaltó la imbatibilidad de los merengues en su feudo. Los 'bianconeri', que atraviesan una delicada situación en la Serie A (son séptimos a 16 puntos del Nápoles y a cinco de la Lazio, el que marca zona de Champions), se exhibieron en Madrid con un 1-3. Y en la quinta jornada, el viaje a Liverpool se convirtió en 'lo esperado':la debilidad de los de Ancelotti ante la fortaleza arrolladora de los de Slot. Anfield dictó sentencia con un 2-0 que dejó al vigente campeón contra las cuerdas:la visita al Atalanta (2-3) permitió respirar a un equipo que rozaba la eliminación europea a las primeras de cambio. 

Supercopa

En su primer gran partido del año, la final de la Supercopa, el Real Madrid volvió a tropezar gravemente ante el Barça. A pesar de comenzar ganando, a pesar de un gran Mbappé y a pesar de una exhibición puntual de Courtois, los azulgrana llegaron a dominar por 1-5 y solo la expulsión de Szczesny permitió maquillar un marcador que amenazaba con irse al escándalo. Un 2-5 final que retrata una realidad incómoda:el Madrid se empequeñece ante los grandes.