La de Grupo Jareño-Tanatorio Virrey Morcillo SL, empresa que recibirá el galardón a la Empresa Familiar en los XXIV Premios San Juan, es ya una historia de cuatro generaciones que han hecho crecer una empresa familiar fundada por Juan Jareño Lozano en los años 20 del siglo pasado. A principios del siglo XX los funerarios como tal no existían, al menos en Castilla-La Mancha, pues eran los carpinteros los que hacían el arca y prestaban el servicio. Así fue como el fundador, ayudado por su joven hijo Julián, comenzó a prestar servicios en Villarrobledo
El siguiente gran paso llegó tras la Guerra Civil, cuando, con la vuelta a la actividad, llegó una necesidad nueva que había que cubrir, pues la gente se preocupaba por no poder asumir los costes de un servicio funerario llegado el caso. Con esa preocupación creció el seguro de decesos y Julián Jareño supo dar una respuesta a esta necesidad, comenzando la actividad aseguradora de la familia en la localidad.
Con la democracia llega la tercera generación a la compañía, pues los hermanos Juan, Alfredo y Julián (todos ellos hijos de Julián) van entrando en la empresa. Su llegada coincide con un momento de impulso y modernización del sector, la actividad funeraria y aseguradora se extiende por toda la comunidad autónoma y los Jareño toman la decisión de asociarse con los funerarios locales en poblaciones de las provincias de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo, con lo que han llegado a prestar servicios funerarios en más de 100 localidades castellano-manchegos.
Alcanzado es logro, en pleno siglo XXI y con la progresiva incorporación de una cuarta generación, la empresa se adaptó al cambio de costumbres, al sustituirse los velatorios en los hogares por los espacios más cómodos y seguros de los tanatorios, además de comenzar a construirse hornos crematorios. Con esa expansión, la familia Jareño participa ahora en la explotación de 25 tanatorios, con tres más en fase de proyecto, tres crematorios (uno en Villarrobledo otro en Quintanar de la Orden y otro en Ciudad Real) y mantiene pólizas aseguradoras en la práctica totalidad de las provincias castellano-manchegas, trabajando con las principales compañías del sector.
La empresa, socia fundadora también de la Asociación de Servicios Funerarios de Albacete (ASFA), se encuentra en una «posición privilegiada para afrontar los desafíos de los años venideros».
Julián Jareño Bonilla y Javier López Jareño asistieron a la presentación de los premios, donde mostraron su ilusión y satisfacción por el reconocimiento que les entregará la Confederación de Empresarios de Albacete.