"Tenemos 90 segundos, tras escuchar la alarma"

Sara Ruiz
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El albacetense Yehosua García tiene doble nacionalidad, israelí y española y reside hace años en Petah Tikva, al norte de Tel Aviv

"Tenemos 90 segundos, tras escuchar la alarma"

Ariel Yehosua García vive en Petah Tikva, al norte de Tel Aviv, y lleva ya más de cuatro años en Israel. Trabaja en una empresa de satélites en el departamento de deportes. Desde 2012 estuvo en Jerusalén y tiempo después, en 2017, volvió a España de nuevo un año. Tras esa estancia en Albacete concretamente, sintió la necesidad de volver a Israel y desde entonces ha hecho de este país su hogar, casado actualmente y con tres hijos. Yehosua se crió y educó como cristiano evangelista; de hecho, sus padres estaban muy involucrados en las actividades de la iglesia y enseñaban en la escuela dominical a otros niños. Sus padres se instruyeron en Teología y prestaron más atención al judaísmo, ya que era conocido debido a los abuelos maternos. De esta manera, Yehosua se adentró en esta disciplina y se convirtió al judaísmo. 

¿Cómo es el recibimiento en Israel de un ciudadano español, concretamente de Albacete, y que se convierte al judaísmo?

No es tan fácil, los israelíes tienen sus normas. En primer lugar tienes que ser judío y demostrarlo. Tienes que hacer conversión, y una carta de recomendación de un rabino, que yo no tenía porque en Albacete no existe una comunidad judía. Por no hacer este proceso tan largo y a través de algún contacto que tenía de las diferentes visitas que yo realicé a este país, se alinearon los planetas y lo conseguí. Fui aceptado en una escuela donde pude realizar esa conversión definitiva. 

¿Tiene familia en otra parte de Israel?

Sí. Mi hermano se encuentra actualmente en un asentamiento en Jerusalén. La historia de mi hermano es muy similar. Enamorado de sus raíces judías, acabó también aquí.

¿Cuáles son sus sentimientos en este momento en pleno conflicto?

Es una situación difícil de entender. Como español no conozco la guerra. Es verdad que en los años que llevo aquí, hemos tenido períodos complicados con lanzamientos de misiles y atentados, pero no en la escala del conflicto que se ha generado días atrás. El sábado que comenzó todo, centenares de familias vieron cómo todavía sin despertar avasallaron sus hogares y mataron a muchos civiles. Los niños ahora mismo se encuentran sin asistir a las escuelas, llevan en casa un mes, los trabajadores no puedan acudir a sus trabajos por seguridad, la industria de la construcción está prácticamente parada...

 Están lanzando cohetes continuamente, sin ir más lejos el pasado sábado sonó la alarma, un sonido muy fuerte y estresante, que es imposible de no escuchar. 

¿Cómo es ese instante en el que tiene que salir corriendo de repente con su familia, sin saber qué va a pasar?

Cuando escuchas esa alarma, sabes que se trata de un ataque y lanzamientos de cohetes, y tienes que coger a tu familia y correr al sótano, que es donde tenemos un búnker. Hay 90 segundos para poner tu vida a salvo. Los niños saben qué hay que hacer, pero es indescriptible explicar la sensación que te recorre por tu cuerpo. 

¿Cómo están sus hijos viviendo el conflicto, sin duda, una experiencia que les marcará de por vida?

Ellos saben lo que está pasando. Echan de menos a sus amigos y la situación les supera. La realidad que tenemos en casa hace prácticamente que sea difícil concentrarte en el trabajo y el grado de estrés se multiplica. El Gobierno ha ofrecido unas recomendaciones en el caso de que haya una amenaza de mayor alcance. No sabemos que va a pasar, pero tenemos preparadas unas mochilas en el caso de que tengamos que abandonar nuestros hogares. Es una mochila de emergencia con alimentos, agua, una linterna y enseres básicos. Cuando salgo a comprar al supermercado ya no se encuentran los productos básicos, pero no por problemas de abastecimiento, sino porque la gente se espera lo peor y arrasa con las compras. Algo muy parecido a lo que ocurrió en pandemia. Espero no usar la mochila.

¿Teme que se extienda el conflicto a otros territorios?

Estamos escuchando que Hezbolá amenaza que si el ejército israelí llegara a entrar por tierra en Gaza, ellos entrarían en el guerra, aunque técnicamente ya estamos en guerra. Tanto ellos como nosotros estamos lanzando misiles. Los episodios bélicos aumentan en la frontera y hemos eliminado, según las noticias que van llegando, unos 70 terroristas de Hezbolá desde que comenzó el día 7 el conflicto. Líbano amenaza también con la llegada de portaviones de EEUU y de la parte de China se escuchan otro tipo de noticias que están calentando el ambiente. Es como una partida de ajedrez y es muy preocupante. Israel es un microcosmos de la cultura occidental en Oriente Medio. Lo que pasa aquí pasará también en Europa y en Estados Unidos. 

¿Cuántos españoles residen en la actualidad en diferentes zonas de Israel?

No estoy en contacto con españoles aquí. Mi hermano está cerca de Jerusalén en un asentamiento y se encuentra en buen estado. Los asentamientos son puntos más calientes y no están asediados por el lanzamiento de misiles por el momento. Se escuchan de forma lejana. Siempre se están escuchando explosiones en el horizonte en las últimas semanas. 

¿Hay inocentes en este conflicto bélico?

Todos los civiles que están matando son inocentes. En 2005 nosotros levantamos los asentamientos y nos fuimos de Gaza. El trato era irse y los palestinos se quedaban con la Franja de Gaza y tener paz. Obviamente, las cosas nos han sucedido así. La población de allí es como rehén del grupo terorrista Hamás. Hay que hacer distinción entre los terroristas y los habitantes de Gaza. Aunque también es cierto que muchos civiles de Gaza entraron armados y mataron, violaron y secuestraron a población civil.