Rubén Albés compareció para hablar sobre el partido que el sábado a las 21 horas disputa el Albacete en Anduva, frente a un Mirandés cuyos datos sin prácticamente idénticos a los del cuadro manchego. "Lo que está claro es que lo hemos hecho igual de bien o de mal hasta ahora, porque tenemos datos muy similares. Nosotros afrontaremos el partido como lo estamos haciendo en este último tramo, con confianza, sabiendo las debilidades que tiene el Mirandés y con la tranquilidad de pensar que estamos en un buen momento y podemos mirar a cualquier rival de frente. Ojalá podamos acabar el partido y sacarle este margen de tres puntos a falta de un partido para acabar la primera vuelta", señaló el entrenador del Alba.
Sobre el rival dijo que "tiene jugadores jovenes con talento, con una propuesta de fútbol ofensiva y son muy peligrosos porque juegan por impulsos. Tienen 10 minutos buenos donde son capaces de sacar mucho rendimiento. A lo mejor no tienen la estabilidad de un equipo maduro y con experiencia, pero en las últimas jornadas han conseguido sacar resultados, con un juego más estable y seguro que va a ser un partido atractivo para el espectador".
El martes se vuelve a jugar, en casa frente al Eldense para cerrar la primera vuelta, pero Albés quiso puntializar que el foco ahora está en Miranda de Ebro, aunque lo que ocurra en Anduva influirá en el siguiente compromiso. "Cada partido que juegas tiene consecuencias en el siguiente, es el efecto mariposa. Lo que ocurra en Miranda nos hará tomar unas decisiones u otras de cara al siguiente partido, por lo tanto, vamos a pensar en ese partido, en sacar un buen resultado en Miranda y eso nos acercará al siguiente. Los partidos, que vemos normalmente independientes, tiene mucha influencia respecto al siguiente, porque al final, desde lo táctico, hay influencia, por eso es importante no pensar más allá del siguiente".
Cuestionado por el 2023 que finaliza dijo que "ha sido un año inolvidable y no hablo de resultados" y destacó "el albacetismo que se está viviendo en la ciudad y como han conectado con esta plantilla y la de la temporada pasada"; también que "somos algo y eso hace al Albacete un equipo reconocible".
Y sobre la primera vuelta que está a punfo de finalizar indicó que "ha sido irregular a nivel de resultados, pero no tanto a nivel de juego, porque no nos hemos diferenciado tanto a nivel de juego, sí de eficacia en las áreas. Creo que a nivel colectivo el equipo ha evolucionado, sobre todo en los últimos tres meses, donde hemos encontrado un funcionamiento, una organización, una estructura que creo que nos sientan bastante bien, que nos hace fluir bastante, más allá de las pequeñas adaptaciones que podemos tener en cada partido. A nivel individual si nos hemos encontrado con mucha irregularidad en el principio de la temporada y posiblemente ahora estamos en un punto más estable de los jugadores en el rendimiento que pueden dar".
"Muchas veces, aunque estés a un buen nivel colectivo, donde las cosas funcionan, hay que encontrar el punto bueno del jugador, ese estado donde es capaz de impactar dentro de ese juego colectivo. Ahora mismo creo que tenemos muchos jugadores en este punto en el que pueden impactar y lo tenemos que aprovechar y tratar de mantener, mejorando determinados comportamiento más concretos en cada puesto que creo que son mejorables. Por eso tenemos esas charlas individuales con nuestros jugadores en las que se hablan de temas emocionales y de aspectos tácticos a corregir que pueden ser mejorables", añadió Rubén Albés.
Por último fue preguntado porqué no lleva jugadores del filial a las convocatorias para tener más opciones debido a las bajas, con partidos donde solo había 18 jugadores. Albés habló claro. "Los jugadores del filial tienen que seguir demostrando cosas, mostrando cosas, tampoco están pasando un buen momento y creo que no sería un premio adecuado ni yo quiero ponerme ninguna medalla de hacer debutar a los jugadores del filial cuando siento que no están todavía preparados. Lo digo duro, pero claro".