Estamos en la primera quincena del año hidrológico. Pese a las últimas lluvias, todos los embalses de Albacete viven bajo la amenaza de la sequía. ¿Todos? No. Un pequeño e irreductible pantano resiste, con sus reservas por encima del 80%.

Se trata del pantano de Almansa que, según el último parte de embalses publicado por la Confederación Hidrográfica del Júcar, está al 83,10% de su capacidad máxima, tras ganar 0,5 hectómetros cúbicos de agua durante la última semana.

Para ser precisos, este embalse almacena 1,33 hectómetros cúbicos de agua, de una capacidad máxima de 1,6. Eso quiere decir que todavía recibe aportaciones de agua de las diferentes ramblas y cauces que vierten en su vaso.

De hecho, este embalse estuvo a punto llenarse por completo hace 15 días, a causa no solo de las fuertes lluvias que cayeron en la zona de Almansa, también en la de Alpera, pues en ésta se rebasaron los 100 litros por metro cuadrado.

Las aportaciones de agua que recibió fueron tan intensas -se midieron caudales de 30.000 litros de agua por segundo en la rambla de desagüe- que no quedó más remedio que abrir las compuertas al 100% durante un día completo.

En cuanto a los demás embalses de la provincia, ni uno solo se acerca, pero ni de lejos, a estos niveles de reservas, de acuerdo a los datos aportados por las confederaciones hidrográficas y el Boletín Hidrológico del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco).

Los que mejor están, pero muy por debajo, también son dos embalses de pequeñas dimensiones. Uno es el Taibilla, en Nerpio, que forma parte de la Confederación del Segura, que se encuentra al 55,5%, pues almacena cinco hectómetros cúbicos, frente a una capacidad máxima de nueve.

Sigue El Molinar, en Villa de Ves. Su nivel porcentual de reservas es del 52,75%, de acuerdo a la Confederación del Júcar; en ete caso, su vaso contiene 2,11 hectómetros cúbicos, cuando puede llegar a contener un máximo de cuatro.

Pero hasta aquí llega la ilusión. En todos los demás, las cifras son tan preocupantes como lo eran hace un mes. Ahora mismo, el Talave, en Liétor, está al 37,1% de su capacidad máxima y contiene 13 hectómetros cúbicos de agua.

Camarillas, en Hellín, baja hasta el 30,5% después de perder dos hectómetros en una semana y quedarse con 11 hectómetros. Pero, una vez más, los embalses en peor situación son el Cenajo, entre Hellín, Férez y Socovos, el de La Fuensanta, en Yeste.

En concreto, el Cenajo está en el 10,9% porque ahora sólo tiene 48 hcctómetros. La Fuensanta repite una semana más como 'farolillo rojo', con un magro 6,6%.