El cine como memoria de la vida

Antonio Díaz
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Juan Ocón Correas tiene 67 colecciones, con carteles, dedicadas a géneros, desde los primeros títulos a las producciones del siglo XXI

Juan Ocón muestra algunas de sus colecciones. - Foto: Rubén Serrallé

Juan Ocón Correas posee una de las colecciones más impresionantes de carteles de películas, con una afición al cine que viene «de toda la vida, ya que desde muy niño recuerdo en Alcázar de San Juan cuando iba al cine con mis padres a ver programas dobles. En los años 50 nació mi afición, que ha ido creciendo. Cuando me jubilé, hace 12 años, decidí dar otro enfoque y me dediqué a la investigación de la historia del cine, desarrollándola por temas». 

Recoció Juan Ocón que, «como la historia del cine es inmensa, una vez metido en materia, vi que me salían distintos temas que fui desarrollando en profundidad, a través de colecciones, entre 100.000 y 150.000 carteles de esas películas ».

Esos carteles, advirtió, «los he ido recogiendo en años y, por ejemplo, en Madrid había dos tiendas de antigüedades, que es donde comencé a adquirirlos y una vez iniciada la colección, me aconsejaron otros establecimientos en Galicia, Barcelona y poco a poco, los fui consiguiendo, hasta los últimos, a través de internet, para completar colecciones».

Son 67 colecciones, agrupadas por temáticas, por orden alfabético, desde el Agua hasta la Filmografía de actores y actrices, pasando por El café, Los deportes y Las olimpiadas, La infancia, La mafia, El pan, El terrorismo, Los toros, El western, Las guerras o La música.

Destacó sobre este trabajo de investigación Juan Ocón que «el cine es la memora de la vida, como recojo en mi trabajo de investigación, así lo he entendido yo y lo he desarrollado, porque a lo largo de casi 125 años de historia, el séptimo arte se ha acercado muchas veces a todos los temas de la humanidad, recogiéndolos en películas, que son el testimonio de cada época de la vida».

Es una apasionado del séptimo arte y eso se nota en sus colecciones, «porque me gustan todas, las 67, pero la que más me ha apasionado hacer son Guerras y la Literatura, ya que  en las guerras, aparte de la civil española, con 600 películas sobre ello, me metí en la primera guerra mundial, con 1.500 o la segunda, 3.000, pero luego hay otros conflictos, Malvinas, Corea, la del Golfo, Vietnam, Secesión, eso es; luego, están las revoluciones, de la rusa a la francesa, pasando por la mexicana, con unos 1.000 carteles, sobre todo de la francesa, de la que se han hecho muchas películas. Tengo un apartado para La Legión, porque cuando estaba estudiando las revoluciones, apareció y hay más de 70 películas».

La investigación, reconoció, desde que cumplí los 62 años, es muy intensa, «hasta hoy, porque para mí, esta colección es como un trabajo, con un desarrollo hasta cerrar colecciones, más o menos hasta el siglo XXI, pero continúo actualizando las colecciones, con estrenos recientes y sus carteles, que son mi memoria de una película, los llamados programas de mano, son todos de este tipo, con alguna excepción. Como te decía, las de los Premios Nobel llegan hasta hoy en día y es una colección que me entusiasma, con más de 500 títulos».    

La parte más importante de la colección de carteles de este  investigador la constituyen películas estadounidenses, «pero todas las cinematografías están presentes, de Yugoslavia o Líbano, con todos los géneros, comedia, drama, todo un amplio espectro de historias».

películas documentadas. Tiene documentadas, Juan Ocón unas 150.000 películas, como advertía, clasificadas por géneros, con muchas temáticas, comentó relacionadas con España, «como El agua, por orden cronólogico y en el título, como Venga agua, de los años 20, La hija del agua, Waterfront y así hasta nuestros días, toda una memoria de las cintas relacionadas, como veíamos con el agua y seguimos con otros géneros interesantes, temas españoles como los toros, pero en todas las cinematografías las hay, incluso toreros que han trabajado como actores, más de 50 y 500 carteles de películas, algunos de ellos son preciosos, de dibujantes como Gago o Ibáñez, en los años 50, 60 y 70».

Todos los temas y géneros reconoció son importantes y «algunos me han costado muchísimo, como la serie de los presidentes de Estados Unidos, desde Abraham Lincoln a Donald Trump, que incluso ha trabajado de actor, o Ronald Reagan, del que tengo más de 50 películas. Claro, es un tema tan enorme y atractivo que lleva una gran dedicación».

Otro ejemplo, Santos en el cine, comentó, «hay 54 santos y 30 santas llevados al cine, todo por orden y para hacer exposiciones, como la dedicada a la Prehistoria en el cine, de la que hay más de 150 películas, incluida la primera, en cine mudo Gertie the Dinosaur, de la que conseguí el cartel, hasta las últimas que se han hecho sobre el tema».

Económicamente, también ha supuesto un esfuerzo para Juan Ocón, «pero es un dinero invertido con mucho gusto, porque he creado una colección que creo que es preciosa, incluso, como decía, para hacer exposiciones, como la dedicada a la música en el cine, de la que hay miles de películas, como de Mozart, que hay unas 85 películas, incluso siete de Álbéniz o Bach, con otras 60, pero tengo de rock and roll 234 personajes y en el jazz, 241».

«Luego -recordó- están todas las películas de los grandes grupos y solistas de The Beatles a los Rolling Stones, hasta de ZZ Top o Pink Floyd».

Recordó el investigador que la última colección que abordó «fue el terrorismo, por la situación, cuando se extinguió ETA, decidí ver si era posible hacer una colección sobre el terrorismo, con 130 películas recogidas, sobre ETA, por supuesto, pero hay otras sobre el IRA, Septiembre Negro o las Brigadas Rojas, también sobre el inicio el terrorismo, todo perfectamente reflejado, con carteles».

Como le gusta el orden alfabético, apuntó Juan Ocón, «una vez que me decidí a abordar este tema a través de los géneros y colecciones, lo inicié con El agua y mi sorpresa fue enorme, porque en el título hay muchísimas cintas que contienen la palabra, como Aguas sangrientas, por poner un ejemplo, pero claro, una vez localizada la película, había que conseguir el cartel y, además esta colección la estructuré como agua en el título, luego lugares donde encontramos agua, fuentes, manantiales, marismas, cataratas, balnearios, ríos, torrentes y hay películas sobre todo esto, como El manantial de la doncella, la famosa cinta de Ingmar Bergman o Cataratas. Es una semblanza del agua aplicada al cine» .