El primer trimestre del año deja en nuestro país un 16% más de personas fallecidas en accidentes de tráfico en vías interurbanas que en el mismo período del año anterior, una cifra demasiado alta, porque se trata de 261 personas que perdieron la vida, 36 más que en 2023. Poner freno a este notable incremento en la siniestralidad vial precisa de medidas que sean efectivas y es lo que se pretende desde el Ministerio del Interior y la Dirección General de Tráfico, con un paquete de actuaciones que anunció el viernes el ministro Grande-Marlaska.
La preocupación por la seguridad vial tiene actuaciones durante todo el año y, de forma especial se realizan diferentes campañas con el objetivo de concienciar a los conductores. La última, de control y vigilancia de la velocidad tanto en las vías urbanas como interurbanas, se llevó a cabo entre el 15 y el 21 de abril y, por lo que respecta a la provincia de Albacete, arrojó el resultado de 831 denuncias por superar la velocidad permitida. En vías interurbanas, la Guardia Civil controló a 9.537 vehículos en las carreteras, de los que fueron denunciados 352 (el 3,69%), mientras que en la capital la Policía Local controló 18.358 vehículos, de los que fueron denunciados 479, lo que se traduce en un 2,6% de sancionados en el casco urbano de Albacete. Unos datos que dejan a las claras que el control de la velocidad es importante, ya que es preciso recordar que del volumen total de sanciones que los agentes pusieron a los conductores infractores el pasado año en la provincia de Albacete, que fueron 46.902, el 70% se debió a una velocidad inadecuada.
Estos datos provinciales, donde se evidencia que el exceso de velocidad es un factor muy importante, se ven corroborados en la radiografía que a nivel nacional realiza la Dirección General de Tráfico de los siniestros viales del primer trimestre, donde se recoge que los fallecidos en autopistas y autovías aumentaron un 50%. Este es uno de los motivos que motiva las nuevas medidas anunciadas por el ministro del Interior, que es el del aumento de la vigilancia automatizada de la velocidad, con la instalación de 95 nuevos puntos fijos de control de velocidad en las carreteras, de los que el 60% serán de tramo, así como el incremento neto de la plantilla de la Agrupación de Tráfico, con la incorporación a finales de año de 150 nuevos agentes, con lo que aumentará su presencia efectiva en las carreteras.
Mayor vigilancia en autovías y autopistas y aumento de los controles de alcohol y drogas son otras dos de las medidas a poner en marcha, porque es evidente que son necesarias actuaciones para poner freno y reducir la siniestralidad vial. Una vez puestas en marcha, su efectividad se comprobará con los datos que arrojen los sucesivos balances sobre esta materia.