Queda semana y media para que se puedan presentar observaciones, aportaciones y alegaciones a las nuevas reglas del Tajo-Segura. El Ministerio de Transición Ecológica abrió la pasada semana el plazo de la consulta pública previa y Emiliano García-Page quiere que su correo electrónico se llene de alegaciones procedentes de Castilla-La Mancha. Por cierto, la dirección es la siguiente: Bzn-dgasec@miteco.es.

El presidente autonómico invocó esta mañana a la sociedad castellanomanchega a hacerse oír a través de este proceso de participación pública. «Quiero que todos ustedes contribuyan a dar su opinón y mejorar en materia de agua», expresó  Emiliano García-Page en el foro la III Jornada 'Castilla-La Mancha, tierra de oportunidades: modelos de negocio para el siglo XXI'. Y es que entre los asistentes a este foro tenía a representantes políticos y del mundo empresarial. Page señaló que quiere que alegue toda la sociedad: los partidos políticos, los ayuntamientos, las diputaciones, las empresas o los sindicatos.

«Sería muy triste que piense la gente que con que lo defienda el Gobierno de Castilla-La Mancha vale», comentó el presidente autonómico durante su intervención en esta jornada organizada por el digital 'Encastillalamancha'. «Está abierto el debate», animó. Y es que se trata de cambiar unas reglas que afectan al Tajo-Segura, aunque al ser todavía una consulta previa no se sabe por dónde van los tiros del Ministerio. Lo único que ha especificado es que el objetivo es cumplir con los caudales ecológicos en el Tajo a su paso por diversos tramos y establecidos de forma progresiva en el último Plan de Cuenca.

Aunque se modifiquen, el presidente autonómico señaló que «las reglas no dejarán de ser de explotación, porque lo que se hace con el Tajo es explotarlo». Recalcó que tener unos caudales ecológicos del Plan de Cuenca han sido un logro, aunque fue necesario ir a los tribunales. «Ya hemos ganado cinco sentencias», expuso, «nos ha costado años y años estar peleando». Apunta que el acuerdo cerrado con el Gobierno de España «no alcanza ni el cien por cien de lo que los jueces nos decían que tenía que ser». Hasta ese punto Page recordó que los castellanomanchegos han sido «generosos en la transición hacia un menor trasvase».