La primera jornada de la huelga en el sector del transporte de viajeros convocada a nivel nacional por Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT) para reclamar la jubilación anticipada para los conductores, ha tenido hoy un seguimiento «masivo» en la provincia de Albacete según los convocantes, quienes, no obstante, calificaron de «abusivos» los servicios mínimos que se habían fijado por parte de la administración.

«El seguimiento ha sido masivo dentro de lo que puede ser cuando nos ponen unos servicios mínimos del 100%, por ejemplo, en el transporte escolar», matizó la secretaria regional de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Lola Cachero, durante la concentración que llevaron a cabo a media mañana profesionales del sector frente a la Subdelegación del Gobierno en Albacete. «Conculca con el derecho a la huelga», consideró.

El subdelegado del Gobierno en Albacete, Miguel Juan Espinosa, recibió a representantes de CCOO y UGT, quienes registraron un escrito para que se eleven las reivindicaciones de jubilación anticipada a las administraciones pertinentes.    

En el conjunto de Castilla-La Mancha estaban llamados al paro 4.000 trabajadores, alrededor de 900 de ellos en la provincia de Albacete. Cachero incidió en que se trata de una profesión de «riesgo» que reúne «las condiciones de penosidad y peligrosidad» necesarias para que se reduzca la edad de jubilación. «Con la edad, disminuyen los reflejos y aumentan los problemas físicos para la conducción», sostuvo.

En este sentido, apuntó que durante 2023, se produjeron en todo el país 149 muertes de conductores, lo que representa el 20% del total de fallecimientos en accidente laboral mientras que esta ocupación solo supone el cuatro por ciento. «Es inadmisible», lamentó, remarcando que no solo se pone en riesgo la vida de estos profesionales, sino también la de los usuarios del transporte y de otros ciudadanos que se pudieran ver implicados en caso de siniestro.

«Con 67 años no se puede estar conduciendo y llevando a 40, 50 o 60 personas en un autobús», lamentó Cachero, alertando también de los riesgos psicosociales que entraña esta profesión, en la que «el estrés y la ansiedad son el día a día» de estos profesionales.  

Por ello, reclaman bien la aplicación de coeficientes reductores para esta profesión, una reivindicación sindical histórica que se remonta a hace dos décadas, o bien el acceso a la jubilación parcial, haciendo un llamamiento tanto a la voluntad política como a la de las empresas para dar una solución a este colectivo. 

Según indicaron desde las organizaciones sindicales, la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus), en transporte de viajeros, y la Asociación de Transportes Públicos Urbanos y Metropolitanos (Atuc), en transporte público urbano, son las que podrían firmar conjuntamente con los sindicatos la solicitud del inicio del procedimiento de aplicación de coeficientes reductores y la jubilación parcial voluntaria para los conductores profesionales. 

Sin embargo, «estas patronales bloquean que se puedan poner en marcha estas medidas», según denuncian CCOO y UGT, que recuerdan que en transporte de mercancías y transporte sanitario sí se alcanzó un acuerdo para que sindicatos y empresas manden un escrito conjunto con la petición de adelanto de la jubilación para este colectivo. 

Más paros. De no alcanzar un acuerdo en transporte de viajeros, hay previstas nuevas jornadas de paros para los días 11, 28 y 29 de noviembre y el 5 y 9 de diciembre. Si no hay avances hasta entonces, la huelga será indefinida a partir del 23 de diciembre.

«Reducir la edad de jubilación disminuiría riesgos y permitiría el relevo y la incorporación de la juventud al sector», señaló por su parte el secretario general de UGT Albacete, Francisco Javier González, quien hizo un «balance positivo» de la huelga pese a unos «servicios mínimos abusivos y desproporcionados».  

El responsable confió en el «diálogo social» para alcanzar un acuerdo tripartito en esta cuestión, lo que también «mejoraría la seguridad vial» y daría respuesta a una vieja demanda de los sindicatos desde hace dos décadas.  

Respecto al transporte escolar, el delegado de Educación en Albacete, Diego Pérez, informó de que la huelga no había ocasionado incidencias en las rutas escolares de la provincia, dado que estaban cubiertas por los servicios mínimos que se habían establecido.

Desde CCOO y UGT lamentaron las consecuencias que esta huelga hubiera podido ocasionar a las personas usuarias del servicio.