"La gente de nuestra tierra cuando cierra un acuerdo y se mira a los ojos, no necesita firmar ningún papel. Si llegamos a un acuerdo lo cumplimos". Paco Núñez defiende de esta forma la palabra de los castellanomanchegos, pero en el caso del Pacto del Agua sí hay un papel firmado y el líder del PP lamenta que está quedando en papel mojado. Por eso exige a Page que convoque la Mesa del Pacto del Agua de Castilla-La Mancha. "Es urgente", le apremia.
El presidente del PP castellanomanchego ha convocado hoy a los medios de comunicación en las Cortes para verbalizar esta exigencia. Recuerda que hace dos semanas se consiguió un acuerdo entre los dos principales partidos en el Parlamento por el río Tajo y quiere que el Gobierno aproveche ese consenso para convocar la Mesa. Además espera que en dicha reunión se aproveche para pedir a la Junta que cumpla con los objetivos firmados en el Pacto del Agua. Núñez afeó a Page que por una parte todavía no se lo ha enviado al Gobierno de España. "No ha dedicado un solo minuto para trasladarle el gran consenso que hay en Castilla-La Mancha", lamenta. Por otro lado, también se queja de que hay medidas que le corresponde tomar al Gobierno regional y todavía no las ha emprendido. "Castilla-La Mancha tenía que haber puesto en marcha un estudio de necesidades hídricas de la región", puso como ejemplo, "no hay ni rastro". Por eso cree que la convocatoria de la Mesa es una buena ocasión para "poder calendarizar todas las acciones que el Gobierno de Page no está llevando a cabo y son urgentes".
Núñez espera que en esa Mesa también se incorpore la voz de los ayuntamientos del río Tajo, algo que se incluyó en el acuerdo alcanzado hace dos semanas por las Cortes. Defiende que es necesario "escuchar la postura municipalista en materia de agua".
El líder del PP cree que el Gobierno regional no quiere aprovechar los consensos en materia de agua porque tiene otros objetivos en mente. Núñez habla de "una estrategia política" y afea al PSOE regional que apueste por "posturas beligerantes para sacar un rédito electoral". Núñez insiste en que los trasvases solo se pueden realizar "en casos de extrema necesidad y nunca a demanda ilimitada de la cuenca receptora". Con esas premisas, cree que el problema del agua en España se arreglará con un acuerdo nacional. "Yo no creo en las guerras, tampoco en la guerra del agua", concluyó.