Novillada engañosa para los matadores

Pedro Belmonte
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Un noble encierro con pocas cosas que decir, se lidió ayer en Albacete, sin clase, descastado y, eso sí, bien presentado

Víctor del Pozo se desmonteró tras el tercio de banderillas al quinto de la tarde. - Foto: Alcolea

Cuando parece que los toros no quieren comerse a los toreros, mucho público, que no aficionados, echan en cara a cuadrillas y matadores que no hayan rematado las faenas para cortar las dos orejas cuando la realidad es que ha engañado a mucho público, que como no les querían quitar la cartera, han pensado que esos novillos han embestido por derecho. Han cortado en banderillas o esperado, alguno ha empujado con franqueza en el caballo y algún otro ha tenido media docena de arrancadas buenas, pero sin entregarse ni con clase en esas embestidas. La novillada no pasará a la historia como la quintaesencia de la bravura, sino como aquella que se dejó torear un poco y que tres jóvenes novilleros, que andan intentando abrirse camino, les han arrancado una oreja a cada res, a base de quedarse quieto y una espada certera, seis estocadas en seis novillos. No nos exijan que podamos concretar si estaban arriba o caídas o contrarias, porque desde la grada cubierta del 5 es muy difícil poder ver con esa exactitud. Si quieren que así sea, que nos subvencionen unos prismáticos para ser lo más exacto posible. Nuestra vista no llega a más y cada año, menos.

Buenas lidias, con las dificultades que tienen estos tipos de animales que nunca han llegado a definirse, pero los lidiadores han demostrado estar por encima de las condiciones de la novillada, destacando a todos los que han pasado con suavidad y sin un capotazo de más a los pupilos de El Montecillo. Caco Ramos en el primero, Víctor del Pozo en el segundo, Palomeque en el tercero, Basilio Mansilla en el cuarto, César Fernández en el quinto y Tomás López en el que cerró el festejo.

No fueron fáciles de picar, entre los que buscaban la vuelta y se iban de naja, la verdad es que no me hubiese visto cómodo encima de los magníficos caballos del Pimpi de Albacete, pero le aguantó bien el arreón Pedro Pío en el abreplaza, bien cogido el segundo por Puchano, al igual que Cedillo el tercero, habilidoso con el enredador cuarto Agustín Moreno, no se le escapó en el segundo encuentro a Dani López con el quinto y un gran puyazo que recetó Richar Romero al que hizo sexto.

Con los palos, ayer pudimos saborear grandes encuentros con los novillos, a los que había que llegar muy cerca y ganarles el terreno, como así lo hicieron Basilio Mansilla y Víctor Martínez en el que abrió la tarde, habilidosos Víctor Fernández y Pascual Mellinas en el segundo, Tomás López e Ismael González que aguantaron la espera del novillo tercero, al igual que tuvo que hacer Caco Ramos y Víctor Martínez con el cuarto, el saludo tras un buen tercio de Víctor del Pozo y un buen par también de Mellinas y dos excelentes pares de Palomeque, al que obligaron a saludar acompañado de un solvente Ismael González.