Un pregón de cariño y risas

A.G.
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La actriz, dramaturga y escritora Llanos Campos anuncia el periodo festivo de la ciudad con un discurso cargado de humor y recuerdos emotivos, en el que rindió homenaje a seres queridos y compañeros del mundo de la cultura

Llanos Campos, pregonera de la Feria, en el balcón del Museo Municipal. - Foto: José Miguel Esparcia

Llanos Campos Martínez, actriz, directora teatral, dramaturga y escritora de literatura infantil y juvenil, tuvo la distinción de anunciar a los albacetenses el inminente inicio de su Feria, declarada de Interés Turístico Internacional. Fue de nuevo en el balcón del Museo Municipal desde donde pronunció un simpático, a la vez que emotivo, pregón para los numerosos albacetenses que la escuchaban desde distintos lugares de la Plaza del Altozano.

Campos ya había expresado a La Tribuna que su intención era disfrutar de ese momento único y hacer pasar un buen rato a todos los presentes. Lo consiguió, con un discurso en el que dio buena muestra de su sentido del humor y conocimiento de las costumbres de su tierra, arrancando más de una carcajada y sonrisas de nostalgia cuando rememoraba sus experiencias en ediciones anteriores de la multitudinaria feria septembrina.

Antes del acto oficial, acompañada del alcalde y la Corporación municipal, la pregonera agradecía a la Corporación haberle concedido «el honor de ser la pregonera de la Feria de mi ciudad, porque no hay cosa que me guste más que Albacete y su Feria». «Estoy contentísima y creo que este es uno de los días que no voy a olvidar nunca», añadía, mientras que el alcalde, Manuel Serrano destacaba que ofrecía el pregón «una de las nuestras, con orgullo y honor». Felicitó a Campos y le agradecía «haber aceptado este reto, que es una responsabilidad por cuánto y cómo se dice de la ciudad en uno de los momentos en que los albaceteños están más expectantes que nunca».

Ya en el balcón, donde pronunció emotivas palabras de cariño para seres queridos que ya no están y sus compañeros del mundo de la cultura, Campos fue construyendo un discurso en el que dejó claro de inicio que «podría sin duda hablar de que tenemos la mejor Feria de España, la más abierta y hospitalaria, la que tiene un pedazo de recinto construido solo para su celebración, con lo que valdrán ahora esos terrenos. Pero señalar todo eso está de más, porque aquí ya lo sabemos de sobra. A los de Albacete nadie nos tiene que vender la Feria».

Después de describir momentos vividos en la Feria, comparándolos con las leyes de la física y con la que todos los presentes podían identificarse (el mareo de las atracciones, las mezclas gastronómicas, los paseos con un peluche o una planta a cuestas o los inesperados encuentros fortuitos), concluyó que «son 10 días de enseñanzas vitales que nos hacen más sabios… si es que al terminar conseguimos acordarnos de algo».

«Nos vemos en los redondeles y sois libres de invitarme a un vinico dulce de la borriqueta. ¡Feliz Feria», cerró la pregonera, tras los siempre coreados vivas a Albacete, la Virgen de los Llanos y la Feria.   

 El acto se cerró con la entrega de una navaja por parte del alcalde y la interpretación del Himno a Albacete por la Banda Sinfónica Municipal, acompañada del Orfeón de la Mancha, Coro Universitario, A Capella Coro, Schola Cantorum y Coral Ecos Manchegos.