El largo camino para convertirse en policía

Josechu Guillamón
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La Comisaría cuenta actualmente con 11 agentes en prácticas, que finalizarán su formación en el próximo mes de junio

José María Talavera, Alicia Pérez y Carlos Garrido, en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. - Foto: José Miguel Esparcia

El pasado 20 de julio llegaron a la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Albacete 11 agentes en prácticas, que finalizarán su formación el próximo mes de junio, tras pasar casi un año en distintas Unidades y patrullando las calles de la ciudad.

Alicia Pérez Martínez, Carlos Garrido López y José María Talavera Rubio son tres de estos agentes, que han tenido que superar un largo camino antes de convertirse en agentes.

En el caso de José María Talavera Rubio siempre tuvo claro que quería ser policía, por lo que en cuanto terminó el bachillerato (estudios mínimos que se exigen para acceder al Cuerpo) comenzó a prepararse las oposiciones.

El albacetense Carlos Garrido López si que estudió una carrera, pero eligió Derecho «porque tiene relación con el tema, porque yo siempre tuve claro que quería ser policía».

Por su parte, Alicia Pérez Martínez, también nacida en Albacete, estudió una carrera y se convirtió en profesora, pero ese no era su futuro y optó por seguir los pasos de su padre. «Al final yo me di cuenta de que la docencia no era a lo que quería dedicarme profesionalmente y me decanté por la policía por los antecedentes de mi familia. Siempre tuve la espinita de ser policía».

La primera prueba a la que tuvieron que enfrentarse para convertirse en agentes fue superar el examen de oposición, algo que no fue fácil, puesto que en su promoción se presentaron unas 40.000 personas para 2.500 plazas, como recuerda José María Talavera. «Es una oposición bastante completa, en el sentido de que hay muchas pruebas y muy distintas. Tienes  una parte teórica en la que tienes que estudiar 41 temas; una parte de ortografía, que hay que estudiar de forma diferente al temario; las pruebas físicas, para las que tienes que estar en forma; la entrevista, que es totalmente distinta a todos los exámenes que has hecho en el instituto o la universidad y por último están los psicotécnicos para los que tienes que estar muy preparado, pero en los que al final no depende tanto de ti, porque son muy rebuscados y te pueden condicionar un año entero de estudio».

 

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