Antes de empezar este reportaje tengo que confesar que no conocía casi nada sobre estas personas así que busqué en el diccionario y salió lo siguiente, zahorí: «persona a quien se atribuye el poder de descubrir lo oculto, especialmente corrientes o pozos subterráneos de agua»..., entonces me vino a la mente imágenes de algún documental o película donde recordaba un hombre con unas varillas de madera que recorría un terreno en busca de algo...

Las personas que están relacionadas con el campo conocen muy bien el oficio del zahorí y han utilizado sus servicios en innumerables ocasiones, pero quienes siempre han estado ligados a la ciudad o son urbanitas, son un poco más escépticos con el tema o simplemente desconocen el mismo.

En la provincia de Albacete, durante siglos, los agricultores sólo se valían de los zahoríes para poder encontrar corrientes subterráneas, hacer un pozo y utilizar el agua no sólo para sus regadíos, sino también para el consumo propio, y el de muchos pueblos que se fueron formando a lo largo de nuestra historia. La Tribuna ha intentado localizar a los pocos zahoríes que quedan en la provincia para que nos cuenten este oficio tan antiguo y que lamentablemente se está perdiendo.

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