Aprendiz de panadero es una de las ofertas de empleo que en otros tiempos podía tener poca demanda, pero no ahora, cuando para muchas personas en paro casi cualquier trabajo es un buen trabajo. Sin embargo para las panaderías no es lo mismo contratar a alguien que sabe del oficio que tener que enseñarle desde el primer día, y la patronal del sector, Ceopan, ha decidido poner remedio con un proyecto de formación pionero en el que 30 personas podrán ir a Alemania para «licenciarse» en panadería, un país donde cualificarse para el oficio supone tres años de estudios, como para otras ramas de saber académico.
Ramón Varea es el presidente de la Asociación Panaderas Albacetense, y también miembro del Comité Ejecutivo de Ceopan, y subrayó el déficit de cualificación que existe para encontrar profesionales que incorporar a las panaderías, pese a los cursos de formación que se ofrecen en la Escuela Regional de Panadería, con sede en Albacete: «Nuestro mayor problema es encontrar el personal cualificado. Ahora mismo, aquí, de ser albañil pasas al paro, y de ahí pasas a un horno, pero la formación requiere tiempo». Entrar como aprendiz puede hacerse, explicó Varea, en panaderías con más personal, y comentó que así sucede: «Lo están haciendo las grandes cadenas, donde hay gente, y si alguien no sabe algo hay quien sí, pero no podemos decir que son panaderos; panadero es quien sabe resolver todos los problemas de un obrador».

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