Son muchas las personas que ante la demora en la atención sanitaria del Servicio Público de Salud para someterse a una intervención quirúrgica se ven obligadas a presentar una queja o varias en el Servicio de Atención al Paciente, y al no obtener la respuesta deseada tienen que recurrir a clínicas privadas.Sin embargo ni siquiera una operación resuelve a veces la dolencia y acaba con el problema de salud que le llevó a pasar por el quirófano. Es el caso de Josefa Rodenas Díaz que, desesperada por los fuertes dolores que sufre y ante el caso omiso que hacen desde su centro de salud a la patología que sufre para que le deriven a un especialista, se ha visto obligada a recurrir a este diario para denunciar su penosa situación.
Previamente esta paciente ha tenido que recurrir a un abogado para que interponga la queja correspondiente ante la Gerencia de Atención Integrada, de la cual todavía no ha recibido respuesta.
Los antecedentes de esta historia comenzaron en el segundo trimestre del año 2022 cuando Rodenas Díaz fue diagnosticada por los servicios médicos del Sescam por un problema de la rodilla derecha que precisaba de una cirugía para el implante de una prótesis completa de rodilla, sin embargo, la demandante ni siquiera fue incluida en lista de espera para dicha intervención, por lo que se vio obligada a ser intervenida en la sanidad privada, lo que la llevó a tener que recurrir a solicitar un préstamo en una entidad bancaria al no disponer de los recursos suficientes para afrontar dicha intervención.
desesperación. Sin embargo, el implante de rodilla al que se sometió Josefa Rodenas no ha aliviado los fuertes dolores que sufre, «llegando en la actualidad a ser prácticamente insoportables», tal y como relata la afectada, lo que ha llevado a la enferma a una situación desesperantes que la tiene sumida en una depresión.La impotencia de esta mujer albacetense por la situación de salud en la que se encuentra es tal que incluso le ha llevado a desear la muerte antes de tener que seguir soportando ese nivel de dolor.
Por ello, la denunciante solicita, a través de la queja tramitada por su letrado ante la dirección de la Gerencia de Atención Integrada, que pueda ser reconocida por los especialistas de Traumatología o por los profesionales sanitarios que correspondan a la mayor brevedad posible, puesto que de momento han hecho caso omiso a su petición en el primer nivel asistencial.
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