El concejal de Cultura Juan José Calero respondió a preguntas realizadas por La Tribuna de Albacete sobre el polémico asunto relacionado con las no proyecciones de películas en la sala de cine de la Casa de la Cultura de la ciudad, dado el número de ocasiones en que los grupos políticos de la oposición han denunciado la "inoperancia" del gobierno municipal del Partido Popular en este sentido.
Son muchos los meses desde que en 2023 la mercantil restringiera el contrato con el Ayuntamiento por causas de índole económica.
Según el concejal de Cultura ahora había una nueva empresa interesada en la gestión del servicio de las películas de cine "pero el grupo político de SPV recurrió el pliego y por eso no hay cine en Villarrobledo", dijo.
No hay cine en Villarrobledo porque SPV ha recurrido el pliegoTras la renuncia de la anterior mercantil para llevar a cabo el servicio de proyecciones de películas en la sala de cine de la Casa de la Cultura los trabajadores del servicio público pusieron manos a la obra para modificar el pliego de condiciones y hacer más atractiva la oferta, porque la anterior no era rentable tal y como dejó claro la mercantil que abandonó la gestión por este motivo.
En 2021 fue cuando concendieron a la empresa la adjudicación del servicio con un plazo de dos años que finalizaba en diciembre de 2023.
La proyección de cine fue interrumpida porque el Ayuntamiento llevó a cabo, con fondos europeos, la obra de rehabilitación energética de la instalación de la Casa de la Cultura pero cuando a la empresa tocó retomar la actividad lo que hizo fue presentar cuentas que iban en perjuicio de la entidad con datos y cifras que mostraban déficit en los beneficios económicos.
No hay cine en Villarrobledo porque SPV ha recurrido el pliegoLos trabajadores del área municipal de cultura hablaron en su día, como una posibilidad incierta de solución al problema, de la posible gestión de las proyecciones digitalizadas sabiendo de la necesidad de hacerse el Ayuntamiento con una máquina cuyo coste ronda los 120.000 euros "porque lo que hay en el departamento está obsoleto y ahora las proyecciones son digitales que se descargan con un código", explicó la directora del servicio.
"Habría que hacer una inversión. Si encontramos máquina de segunda mano, por 50.000 euros, podría valer y habría que rentabilizarla, pero con las distribuidoras una Administración es muy difícil que pueda hacer eso", comentó la trabajadora responsable del servicio en el Consistorio, Ana Simón.