Miguel Núñez Borreguero fichó el Albacete en 2008 para jugar en su filial, tras jugar la temporada anterior en el Villanovense, también en Tercera División. Nació en Siruela (Badajoz) y se formó en el Flecha Negra, club de la capital pacense. En 2004 fichó por el Valencia, en cuya cantera estuvo tres años. Con 21 años cogió el tren que pasó por su puerta para tratar de demostrar en el Albacete B que podía llegar al primer equipo.
En la campaña 09-10 fue Julián Rubio el que vio las condiciones de este medio centro reconvertido ahora en defensa central y le hizo debutar con el primer equipo en Segunda División un 30 de enero de 2010, en un partido frente al Rayo Vallecano en el Carlos Belmonte. Fue en el minuto 70 cuando Núñez entró en el campo en sustitución de Verza y no pudo tener mejor debut el jugador extremeño, ya que en el minuto 83 lograba con una espectacular volea el gol que le valió al Albacete para empatar el partido (2-2). A partir de ahí se ganó la titularidad y su contrato con el primer equipo.
La temporada que está a punto de terminar es la sexta de Miguel Núñez en el Albacete y entre Liga y Copa acumula 179 partidos jugadores, de los 149 de ellos lo ha hecho como titular. Si juega el domingo en Lugo cumplirá su partido 180, una cifra considerable para un jugador que se considera de la casa y que se ha ganado los galones de capitán por su entrega, compromiso y carisma dentro del vestuario.
«Yo tengo un año más de contrato y estoy muy a gusto aquí. Se dan todas las condiciones para disfrutar del fútbol y me he sentido muy cómodo desde que llegué al filial. De momento no se me pasa por la cabeza marcharme de Albacete», comentó ayer el jugador al ser cuestionado por su situación contractual.
Núñez considera fundamental que se mantenga la confianza en el cuerpo técnico y en la plantilla. «Confiar en el cuerpo técnico que dio el ascenso y ha mantenido al club en Segunda ha dado una estabilidad que era fundamental para el futuro. Por supuesto me alegro mucho por todos ellos con su renovación».
«Es bueno que se piense mantener el 75% de la plantilla. Cuando las cosas se dan bien hay que mantener la misma línea. Ya el año pasado se mantuvo el bloque del ascenso y antes se había mantenido la base de años anteriores. Todo eso favorece a que lleguen los resultados y también le da al club una estabilidad, porque siempre hay gente que conoce la dinámica y los nuevos se acoplan rápidamente. Es una buena noticia para todos que se quiera mantener la misma línea», añadió.
Núñez llegó al primer equipo procedente del filial y por su condición en cierto modo de canterano se le preguntó por la intención del club de que la próxima campaña haya cuatro canteranos con ficha del primer equipo. Como siempre, el extremeño fue muy claro. «Es bueno que se quiera que los chavales de la cantera lleguen al primer equipo, pero soy de los que piensa que hay que tener paciencia y no hay que tener a la fuerza canteranos todos los años. Hay veces que la gente llega por su propio peso, no hay que obligar nada, porque a veces se les carga de responsabilidad que no les pertenece. Hay que tener paciencia con la gente de la cantera».
Por último, sobre la temporada que está a punto de terminar y la salvación tras lo difícil que se pusieron las cosas en la primera vuelta, Miguel Núñez concluyó señalando que «con la victoria ante el Llagostera ya era casi imposible que bajáramos, pero el resultado del Osasuna el sábado fue lo que nos dio realmente la tranquilidad. Después de una primera vuelta en la que nos costó mucho, hay que darle mucho valor a la segunda. Ha tenido mucho mérito en todos los aspectos, desde los dirigentes teniendo la cabeza fría y mostrando confianza en el trabajo que se estaba haciendo hasta mis compañeros en la plantilla, que han hecho un trabajo impresionante».