La tradición de hacer sonar los tambores también se vive en Tobarra, donde se extiende la declaración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad para la tamborada de esta localidad albacetense, en la que la costumbre es que el repique de los tambores suene de forma ininterrumpida durante 104 horas, desde las 15 horas del Miércoles Santo con la tradicional Tamborada Escolar hasta que acabe el Domingo de Resurrección.
Dentro de esas 104 horas de toque sin descanso, sólo hay un momento en el que el silencio regresa a Tobarra, el de la Bendición en el Calvario, ya que, al terminar el solemne acto, miles de tambores vuelven a tocar.
De esta forma, este año en el que el cambio al horario de verano se produce en la noche del Sábado de Gloria al Domingo de Resurrección, Tobarra no adelantará los relojes para poder disfrutar de esos 60 minutos de tambor, y el horario se verano se aplicará desde la noche del domingo al Lunes de Pascua.
En Tobarra se esperan más de 7.000 tambores en los puntos álgidos y los tamborileros lucen túnicas de colores, con predominio del morado.