El Museo Municipal de Albacete, en su primera planta, acogió la inauguración de la exposición Yeste, de Luis Lozano Garay, en un acto en el que el artista estuvo acompañado, entre otras autoridades, por el alcalde de Albacete, Manuel Serrano; y el alcalde de Yeste, Santiago Alarcón. Igualmente, además de numeroso público, compartieron con Luis Lozano en esta apertura muchos artistas.
La muestra, Yeste, que se puede visitar hasta el 5 de noviembre, es un trabajo de investigación escultórica, hierros modelados, pintados, oxidaciones y herrumbres que dan testimonio del paso del tiempo, a veces congelado en la memoria.
Luis Lozano Garay comentó a La Tribuna de Albacete que «Yeste continúa en la línea que sigo últimamente, trabajando el hierro, como una prolongación de lo que hice para el Museo de Albacete o lo que también presenté en el Café del Sur o en la Librería Popular».
Un trabajo que habla de la perfección técnica y artística de la obra de Luis Lozano que, como es habitual en él comienza con bocetos, que también se pueden ver en el Museo Municipal de Albacete y «después, los bocetos que hago inicialmente, los paso a barro, porque me sirven para ver los volúmenes y, seguidamente trabajo con el hierro, dándole forma en el yunque y luego van soldadas las distintas piezas».
La muestra, de alguna forma, confirmó el artista, tiene que ver con Yeste, con sus paisajes, con sus gentes, con sus aldeas y sus tierras, con los colores y tonos de la zona me sirve «para hacer un homenaje en esta exposición a las costumbres, las personas, los cortijos y también hablo un poco del pasado del pueblo y las distintas facetas de la vida, en 21 piezas, con sus correspondientes bocetos para que el público vea cómo fue el proceso creativo y mi forma de trabajar», explicó Luis Lozano Garay.
El escultor y pintor apuntó que la obra que presenta es fruto de más de un año de planificación y «como estoy trabajando ahora también con otros materiales, como la piedra o la madera, quería que el público viese también esta parte de ese trabajo que estoy haciendo, en esta ocasión he traído esculturas de bulto, desnudos femeninos, y he incluido algunos altorrelieves, cuatro o cinco. Las obras tienen el nombre de un personaje ficticio y cuento alguna anécdota de su vida y las relaciono con otras facetas, como las costumbres del pueblo, la gastronomía o la emigración, incluso algunos sentimientos».
Es una obra muy asequible, no se trata de piezas para entendidos, pero en todo caso la técnica sí es muy importante en el trabajo de Luis Lozano Garay, que no sacrifica tampoco el mensaje y aseguró que «pienso que no todo vale en esto del arte, el que quiera decirlo, que ahora vale todo, muy bien, pero a mí no me sirve. Las obras tienen que tener una técnica y decir algo y le doy mucha importancia al trabajo, a lo que estoy haciendo, para que transmita. Luego, esta todo muy bien modelado, para que esa obra tenga movimiento y me gusta que una obra se pueda ver en todos sus planos, que esté equilibrada y acabada». Una auténtica lección de arte, de escultura, es lo que ofrece Lozano Garay en el Museo Municipal, con una obra que da buena nota de los acentos que transmite el yunque.