La localidad de Casas Ibáñez, cabeza de comarca de La Manchuela albacetense, busca dinamizar sus recursos turísticos y grandes potencialidades medioambientales, no en vano está situada en pleno valle del río Cabriel, reconocido como Reserva de la Biósfera por la Unesco, tal y como recuerda su alcalde, José María García.

El regidor, que afronta su primer mandato al frente de la Corporación ibañesa, asegura que «estamos trabajando, de la mano de las instituciones, en ese objetivo de potenciación del sector turístico para dar un decidido impulso al municipio, es una de la líneas claras que tenemos planteadas en los próximos años, porque el turismo es uno de los ejes vertebradores, junto a la agricultura y la industria, para fijar población». 

«Tenemos un entorno maravilloso -añade- que debemos divulgar, de hecho está pendiente la adecuación del paraje de La Terrera para buscarle funcionalidad y proyectarla al exterior y también tenemos unas bodegas que elaboran caldos de gran calidad, porque el enoturismo es otra de nuestras grandes potencialidades».

En otro orden de cosas, alude a la importancia del polígono industrial de Casas Ibáñez, «una referencia en la provincia, donde hemos hecho una inversión importante en su mantenimiento y tenemos como plan de acción en la legislatura poner en marcha la ampliación del mismo, para generar más suelo industrial que propicie la implantación de empresas o la ampliación de las instaladas; ahora mismo estamos en el proceso de calificar suelo y después elaboraremos el proyecto correspondiente y acometeremos la urbanización». García apunta además que «tendremos que modificar varios puntos del PGOU con el fin de propiciar la dinamización económica, un proceso largo y laborioso».