El teniente Alejandro Fernández Santos, es uno de los pilotos del Ala 14 que ha ejercido labores de Policía Aérea en Rumanía. Tras estar desplegado desde finales del mes de noviembre en la rumana Base Aérea de Mihail kogalniceanu de Constanza, ya ha regresado a Albacete, tras su primera misión de Policía Aérea en el extranjero.
A usted le ha tocado participar en la misión en el primer relevo de personal, ¿cuántos relevos está previsto que haya?
A lo largo de los cuatro meses que el Ala 14 despliega en Rumanía, se producirán varios relevos de personal, de modo que la mayoría de seriales contarán con un relevo. Esto dota de flexibilidad a la misión e incrementa la operatividad, permitiendo que el personal no se ausente de su puesto de trabajo en Albacete durante un largo periodo de tiempo, manteniendo así la experiencia en los talleres, las secciones de mantenimiento o evitando las pérdidas de las calificaciones de vuelo. Además, es un punto a favor de la conciliación familiar.
¿Había ejercido alguna vez más como Policía Aérea en la zona del Este de Europa?, ¿en qué época?, ¿dónde?
El eAP67 (Enhanced Air Policing o Vigilancia Aérea Mejorada) en Rumanía es la primera misión de Policía Aérea que realizó en mi vida profesional. No obstante, el Ala 14 cuenta con numerosos despliegues de Policía Aérea a sus espaldas. Algunos de ellos son Lituania en 2006 y 2016 o Bulgaria en 2022.
¿Cómo ha sido la experiencia para usted?
Desplegar de misión en el extranjero es un hito para cualquier militar. La experiencia está siendo muy enriquecedora tanto a nivel personal como profesional. Los despliegues son ocasiones muy singulares que permiten, por un lado, reforzar los lazos entre compañeros de trabajo o conocer mejor la calidad personal de las diferentes dependencias de la base; mientras que, por otro lado, una misión en el extranjero ofrece oportunidades únicas de entrenamiento y formación.
Hablando desde la experiencia de mis compañeros de escuadrón, las misiones de Policía Aérea que se realizan en los Países Bálticos son ligeramente distintas de las que se realizan en Europa del Este. Pese a que la función, la preparación y los requerimientos son los mismos, la actividad aérea de estos territorios es distinta, así como las oportunidades de entrenamiento disponibles.
¿Cuántas horas de vuelo llevan realizadas los pilotos del Ala 14 en Rumanía?
La actividad aérea en la Base Aérea de Mihail Kogalniceanu está siendo considerable. Estamos orgullosos de poder decir que ya hemos superado las 400 horas.
¿Ha sido muy diferente su misión con respecto a la que realizan en España?, ¿cambia mucho la climatología?, ¿cómo les ha afectado?
Desde luego. El relevo que se hizo a las Alas 15 y 12 a finales de noviembre fue un periodo exigente dedicado a establecer una doctrina de trabajo adecuada para operar con nuestras aeronaves, así como numerosos procedimientos y certificaciones para el QRA (Quick Reaction Alert o Alerta de Reacción Rápida). No obstante, la rutina que se ha establecido no es menos exigente. El personal lidia con los vuelos de entrenamiento y el Servicio de Alerta diariamente, todos los días de la semana. Además, hay que tener en cuenta que todo ello se ejecuta con un grupo reducido sujeto a un cuadrante de turnos y guardias de permanente disponibilidad.
Respecto al entrenamiento, a pesar de que también contamos con algunas limitaciones, el despliegue nos permite explotar un espectro concreto de misiones dentro del gran abanico que entrenamos en la Unidad, generalmente con mayor complejidad gracias a la participación internacional o los activos que se encuentran allí.
La climatología en Rumanía es diferente de la peninsular. Las bajas temperaturas nos han obligado a implantar procedimientos específicos para el hielo y la nieve. Adicionalmente, es una zona inestable con gran humedad, por lo que son comunes la niebla o los cielos cubiertos con techos bajos. Esto requiere de una mayor atención a las condiciones engelantes, la operación doméstica de las aeronaves (despegues y aterrizajes) o los cálculos de combustible.
¿Han tenido que hacer salidas de emergencia porque algún avión se haya metido en el espacio aéreo rumano sin permiso o sin comunicarlo (Alfa-Scramble o A-SCR))?, ¿cuántas?, ¿cómo actúan en estos casos?
Proporcionamos un servicio de alerta de 24 horas durante toda nuestra estancia en Rumanía. Los A-SCR son eventos para los que permanecemos siempre preparados y que cuentan con una probabilidad razonable.
Para cumplir con el Servicio de Alerta hay un equipo de mecánicos, pilotos y armeros disponible para responder ante un aviso de A-SCR en cualquier momento. Se activa mediante una alarma que anuncia el A-SCR, acto seguido se inicia el proceso para lanzar los aviones en el tiempo que se haya estipulado por la cadena de mando. Es clave la compenetración del equipo para llevar a cabo la activación con éxito. Una vez en el aire, se aporta más información sobre el motivo del Alfa-Scramble para actuar según los requerimientos de la misión.
¿Han tenido en algún momento sensación de peligro?
El vuelo de caza lleva una serie de peligros asociados de manera inherente. Desde los primeros vuelos de enseñanza en las academias se enseña a mitigar estos peligros mediante gestión de matrices de riesgo, análisis previo en los briefings (sesiones informativas) y de ejecución en los debriefings (informes).
Operar en el extranjero, ejecutar misiones internacionales o volar misiones de QRA conlleva una serie de riesgos específicos que tratamos de la misma manera. De este modo mitigamos la sensación de peligro sustituyéndola por concentración, disciplina y entrenamiento.
¿Se siente en la zona la tensión a consecuencia de la guerra de Rusia y Ucrania?
El despliegue en Rumanía se enmarca dentro de las misiones de apoyo a países miembros de la OTAN. Ese es el propósito del eAP y está completamente orientado hacia la soberanía nacional y de la Alianza. La cercanía con la guerra de Ucrania se traduce en un incremento de actividad aérea y presencia de activos en las inmediaciones, sin embargo, es ajeno a la defensa de las fronteras donde nos encontramos.
¿Han aprovechado su estancia en la zona para realizar algún tipo de ejercicio?, ¿cuál?, ¿en qué ha consistido?, ¿han realizado ejercicios con fuerzas españolas desplegadas en la zona o con fuerzas aéreas de otros países?
Gracias a la presencia internacional disponible en Rumanía estamos pudiendo realizar misiones de gran interés durante nuestra estancia. Destacan las misiones de CAS (Close Air Support) con JTACs españoles de Infantería de Marina, estadounidenses, franceses y belgas. También realizamos misiones con cazas F-16 rumanos, sistemas superficie-aire franceses y Awacs de la OTAN.
Adicionalmente, de manera regular participamos en ejercicios internacionales de mayor entidad denominados FDO (Flexible Deterred Option o Opción Disuasoria Flexible). Estos ejercicios se realizan tanto en espacio aéreo de soberanía rumano como fuera de sus fronteras. Uno de los últimos tuvo lugar en Letonia, donde el Ala 14 cumplió otro hito al posicionar dos Eurofighter españoles en este país báltico, realizar la misión y regresar. Un vuelo de larga duración con sobrevuelo por diferentes países, con repostaje aéreo de un A330 perteneciente al MMU y un A400M alemán, y en el que participaron cazas de otros países de la Alianza como Francia, Finlandia, Italia y Países Bajos.
En cualquier caso, entiendo que el mejor entrenamiento ha sido el participar en una misión real.
Así es. Aunque es el conjunto de todas las partes que se han ido mencionando, lo que compone el concepto de misión real. Operar desde una base aérea ajena en un país extranjero, poder entrenar asiduamente con fuerzas aliadas, trabajar en contacto estrecho con controladores rumanos, convivir con el personal de la base, etcétera.
¿Ha sido duro pasar la Navidad fuera de casa?, ¿cómo celebraron días clave como la Nochebuena o la Nochevieja?
Es la parte más amarga de la estancia fuera. Siempre es duro estar alejado de la familia, pero hay fechas en las que cuesta un poco más. Sin embargo, es un sentimiento ambivalente, pues es muy bonito poder estar de servicio de QRA en Nochebuena, en una misión real. Es una muestra de compromiso hacia España que llena de orgullo y realización.
Por otro lado, el equipo desplegado en Rumanía es excepcional. La Navidad y el Año Nuevo se celebraron reunidos como una familia, lo que nos acercó a casa un poco más. Unas reuniones para compartir donde no faltó la cocina española.
¿En qué fecha finalizará el despliegue del Ala 14 en Rumanía?
EL eAP67 comprenderá desde finales de noviembre hasta principios de abril, contando con los dos periodos de relevo.
¿Se sabe si en 2025 llevarán a cabo alguna otra misión real?
El futuro siempre es incierto, en esta empresa, si cabe, aún más. En los últimos años España está ofreciendo servicio de QRA en diferentes países con una notable continuidad. El 2025 seguro nos deparará ejercicios internacionales dentro y fuera de nuestras fronteras. Respecto a las misiones, habrá que esperar un poco más para ver si se materializa otro despliegue en Europa del Este o los Países Bálticos en el segundo semestre.