El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Francisco Núñez, ha propuesto este martes una serie de compensaciones fiscales para autónomos y pequeñas y medianas empresas, que permitan paliar los efectos que está generando la alta inflación y el encarecimiento de la energía y de los combustibles.
Antes de mantener una reunión con miembros de la junta directiva de la Federación de Comercio de Albacete (Fecom), Núñez ha explicado que dentro del plan fiscal del Partido Popular para beneficiar a autónomos y pymes figura la propuesta de bajar el trámito autonómico del IRPF, eliminar impuestos como Sucesiones y Donaciones, Patrimonio y Transmisiones o de Actos Jurídicos Documentales, eliminar también vía bonificación el 99% de los impuestos propios de la Comunidad Autónoma, así como los vinculados a la compraventa de cualquier inmueble relacionada con la actividad industrial y económica regentada por trabajadores autónomos.
"Hay que poner en marcha medidas que incentiven el trabajo autónomo", ha reclamado Francisco Núñez, que en este sentido ha defendido la necesidad de atraer el domicilio fiscal de los autónomos que lo tengan fuera de Castilla-La Mancha, incentivar la creación de empleo e incorporar al tejido autónomo a los planes especiales de empleo, permitiéndoles contratar al 50% de los desempleados, con el fin de que puedan obtener seis meses de ayuda económica por un contrato laboral.
Asimismo, el presidente regional del PP ha reivindicado la simplificación de los trámites administrativos y burocráticos, pues su complejidad está provocado que Castilla-La Mancha sea "la peor comunidad autónoma en la gestión de estas ayudas, pues de cada tres euros que llegan a la Comunidad Autónoma para autónomos, el Gobierno de Page devuelve dos, porque son incapaces de gestionarlos".