Madrileño de nacimiento, Máximo Hernández llevaba ya un tiempo apartado del fútbol y con diversas enfermedades que se habían agravado en los últimos días hasta fallecer el pasado 22 de marzo, con 74 años. Hombre de carácter, tuvo dos pasos por el Albacete Balompié en diferentes épocas y suyo es recordar su figura. En su etapa como jugador militó en clubes como el Celta de Vigo y el Sporting y tuvo varias etapas con el Rayo Vallecano en Segunda, donde llegó a ser capitán. Tras su paso por el modesto Eldense colgó las botas en 1975 e inició su periplo de entrenador.
En la temporada 1979-80, tras su paso por el banquillo de Ceuta, llegó al Albacete Balompié, que entonces militaba en Tercera División, con Fernando Navarro como presidente de la entidad manchega. El Alba estaba en el grupo VI, junto a equipos murcianos, valencianos y alicantinos. Ascendía el primero de los 20 equipos que formaban el grupo y el Albacete quedó segundo tras 38 jornadas a dos puntos de diferencia con el Cartagena, que fue el campeón.
No hubo ascenso, pero el año había sido bueno, sólo cuatro derrotas, así que Máximo Hernández se mantuvo en el banquillo del Albacete para la temporada 1980-81, en la que pasó a jugar en el nuevo grupo XIII de Tercera con muchos más equipos murcianos y algunos alicantinos, sin olvidar los cercanos Villarrobledo, Hellín.
La temporada no empezó mal, pero algo debió pasar para que el club perdiera la confianza en Máxima Hernández, que dejaba el equipo tras la séptima jornada tras haber sumado ocho puntos merced a tres victorias, dos empates y dos derrotas. Luiche fue su sustituto e, igual que pasó la temporada anterior, el Alba quedó segundo por detrás del Lorca. Esta vez había promoción de ascenso para los dos primeros, pero el Albacete fue eliminado por el Binéfar de Nacho Bergara, que a la temporada siguiente se convirtió en el nuevo entrenador del Albacete.
Máximo Hernández tuvo un fugaz paso por el banquillo el CP Villarrobledo en la temporada 1990-91 en Tercera División y en su trayectoria echó raíces en Soria. Llegó al Numancia en 2002 para ser director deportivo e hizo labores de entrenador en diferentes etapas en Primera y Segunda. En 2007 cerró una larga etapa en Soria para fichar por el Albacete Balompié.
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