Editorial

Una Conferencia de Presidentes para sumar

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Es mejor construir país desde la unidad de acción, como apuntó García-Page

La ciudad de Salamanca acogió la XXIV Conferencia de Presidentes de España, de la que salió el compromiso del Gobierno central de que las autonomías gestionen el 55% de los fondos europeos de recuperación, es decir, 10.500 millones, de los 19.000 que la UEanunció que destinaría a España en este año. Las previsiones eran que esta conferencia de líderes autonómicos -salvo Cataluña- fuese de más confrontación, pero, a tenor de las palabras del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, todas las autonomías se mostraron en la misma línea en cuanto al proceso de vacunación y la recuperación económica y la generación de empleo, a través de la llegada de los fondos europeos antes citados.

García-Page valoró el «compromiso unánime» de todos los presidentes autonómicos de cumplir con el objetivo de la vacunación, un proceso que ya empieza a dejar entrever los primeros resultados con menor contagio entre la población con las dos dosis administradas y síntomas más leves entre las personas afectadas.

El presidente castellano-manchego aseguró que se dejó atrás el ambiente de « impotencia, mucha incertidumbre y una caída brutal del PIB» de la anterior reunión de La Rioja, para pasar a «un planteamiento de superación en una reunión que ha ido acompañada de buenas formas».

La conferencia de Presidentes debe ser un foro constructivo para apuntalar el futuro nacional. Con la descentralización, en muchas cuestiones el Gobierno central está en manos de las administraciones autonómicas, como es el caso de la vacunación, sin ir más lejos. Una buena coordinación supone el éxito de los proyectos, en cambio la confrontación gratuita enponzoña aún más si cabe la situación actual, que lo único que requiere es paz política y social. En la mayoría de las ocasiones, los presidentes de las autonomías han sido un ejemplo de lealtad institucional durante los últimos meses y son los que realmente tuvieron que gestionar la pandemia al tener transferidas las competencias de sanidad.

Ahora bien, por parte del Gobierno central no se debe jugar con doble baraja y citar a todos los dirigentes regionales y conceder, bajo cuerda y en reuniones bilaterales al margen, un trato de favor hacia Cataluña y el País Vasco, en estos momentos fundamentales para la sostenibilidad de Pedro Sánchez en La Moncloa. La España multinivel presentada por el Ejecutivo en los últimos días y representada en la Conferencia de Presidentes, con la ausencia del catalán Pere Aragonès, que prefirió viistar a Puigdemont en Bélgica, no tiene cabida porque discrimina a españoles de primera y de segunda categoría. Es mejor construir país desde la unidad de acción, como apuntó García-Page.