Me gusta este calificativo de ‘Boinas Verdes’, tanto por la composición léxica de sus dos palabras como por el sonido que emiten al pronunciarse. Cuando indago en documentación sobre el tema, me sigo sorprendiendo del objetivo que dio origen a este cuerpo y sobre todo, de lo que ha supuesto para el concepto militar de los tiempos contemporáneos. Desde mayo del año 2012 y después del Ejército Dynamic Mix-02 celebrado en España y llevado a cabo por el Mando de Operaciones Especiales, España fue reconocido por la OTAN como nación líder en este tipo de operaciones. Tan solo las Unidades Especiales de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido tenían esta distinción. Eso me hizo sentirme orgulloso de ello y a la vez, potenciaba mi concepto de admiración sobre el Ejército Español.
Estos Cuerpos Especiales residen en Alicante donde su cuartel está ligado, en la preparación necesaria, a la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales en Jaca (Huesca). Tres unidades GOE dentro del Ejército de Tierra: ‘Valencia III’, ‘Tercio del Ampurdán IV’ y la ‘Bandera de Operaciones Especiales Caballero Legionario Maderal Oleaga-BOEL’.
Y resulta que en esa dimensión que supone su conocimiento tengo que resaltar al coronel Fernando Antón Bernalde, actualmente subdelegado de Defensa de la provincia de Cuenca, por ese compromiso adquirido en dar a conocer estos Cuerpos Especiales con una magnífica exposición fotográfica que abandera con experiencia y magistral disertación por su parte, en lugares específicos de nuestra provincia de Cuenca, como Huete, Arcas y San Clemente. Son lugares que definen Alcarria, Sierra y Mancha, especiales en su localización geográfica, expertos en su expresión cultural y ricos en patrimonio y pasado, características que hacen de esta actividad una referencia nacional.
Por eso, ‘Boinas Verdes’ es un concepto definitorio de elevado rango que la sociedad española debe conocer en su profunda definición y actividad; no solo conocer, sino aplaudir y potenciar con su apoyo y su valoración. Desde su creación como mando de Operaciones especiales, sus unidades han participado en la totalidad de las Misiones en las que un contingente español ha desplegado tanto en sus valores humanitarios como en ese necesario mantenimiento de la paz. Afganistán, antes y ahora, puede ser el más claro ejemplo, sin olvidar Líbano, Bosnia, Kosovo, Irak, Mali, entre otros lugares de este mundo globalizado donde el poder del dinero sigue rasgando las vestiduras de la solidaridad, igualdad, equidad y paz.
Este próximo miércoles, día 6, el coronel Fernando Antón formará parte como invitado de la comida de hermandad que el grupo tertuliano ‘El Garbanzo’ de nuestra ciudad -del que afortunadamente soy uno más- ha querido rendirle, por sus valores como persona, por su experiencia como soldado español y por su condición de ‘bonhomía’ que su personalidad despliega en cada momento compartido. En ello, hacemos plausible, con ilusión y firmeza, lo que el grupo de ‘Boinas Verdes’ supone para nuestro país y para nuestra sociedad.
El Garbanzo es amistad y en esa clave está el valor principal de una sociedad que necesita enriquecer más los valores universales que dieron sentido al respeto y la dignidad del ser humano en tiempo donde la terquedad, ironía, mala praxis y el egoísmo rompen los esquemas de la igualdad. Sus miembros son especiales y por eso, les aplaudo.