Una meteorología agradable acompañó a los establecimientos de hostelería de la capital y la provincia en su segunda jornada, la primera de fin de semana, después de que el Gobierno regional aprobara un Decreto por el que flexibilizaba las restricciones frente al Covid-19, después de duras semanas para este sector, que se vio obligado a cerrar sus puertas y confinarse ante el avance vertiginoso de la tercera ola de la pandemia.
Los albacetenses volvieron a acudir de forma notable a bares y restaurantes, mostrando así su apoyo a un sector duramente castigado por la pandemia, y puesto que el toque de queda no se ha modificado y los hosteleros no pueden ofrecer cenas al verse obligados a cerrar sus negocios a las 21 horas de la noche, alargaron las comidas en lo que se ha dado en llamar el tardeo.
Y así, los hosteleros pudieron atender a su clientela sin la presión de tener que registrar mediante la aplicación Ocio Responsable a quienes acudieron a sus locales, que por su parte tampoco estaban obligados de momento sólo con carácter voluntario a descargarse el código QR. Algo que es posible porque ayer el Gobierno regional publicaba en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha una resolución por la que rectificaba la que entró en vigor el día anterior en relación con las medidas de prevención y contención del coronavirus en bares, restaurantes y resto de establecimientos de hostelería, mediante la toma de datos a través de la aplicación Ocio Responsable, creada y gestionada por la comunidad autónoma. De esta forma, se amplía el plazo hasta el 12 de marzo, un mes por tanto, para la adaptación de las personas que deben darse de alta en dicha aplicación, tanto hosteleros, como clientes que a partir de esa fecha sí tendrán la obligatoriedad de descargarse ese código QR cuando accedan a un establecimiento de hostelería, como media de rastreo ante posibles casos Covid-19.
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