Desde después de verano ya es posible desplazarse hasta el polígono industrial de Romica utilizando el tramo de autovía en que se ha convertido parte de la carretea N-322, después de años de obras, y la satisfacción es la nota dominante entre los usuarios de esta zona, tanto trabajadores como empresarios. De hecho, desde la Asociación de Empresarios del polígono, Adepro, se indicó que ya hay síntomas de que se ha despertado de nuevo el interés por la actividad en esta zona industrial. Así lo manifestaba Leonardo Carrasco,  que indicó la autovía ya es vista también como una oportunidad económica: «En un año, en mi empresa, podíamos tener cinco llamadas interesándose por Romica, y ahora en una semana hemos alquilado seis naves industriales»
El representante de Adepro subrayó que «la gente está muy contenta con tener por fin la autovía terminada después de cuatro años de obras y con una carretera infernal». Con las primeras semanas de tráfico normal en la autovía hasta Romica, Leonardo Carrasco explicaba que  «hemos comprobado que desde la plaza del Altozano tardamos 10 minutos hasta Romica, tardamos lo mismo, incluso menos, que sí vamos desde el mismo sitio hasta algún unto de Campollano Norte», explicó.

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