Oportuna y acertada, además de beneficiosa para los empresarios, los usuarios y consumidores, la Administración y, en definitiva, para todos los castellano-manchegos. El consejero de Hacienda, Arturo Romaní, predicaba así ayer las bondades de la nueva Ley del Juego y Apuestas de Castilla-La Mancha, cuyo debate tuvo lugar en el Pleno de las Cortes regionales para su posterior aprobación definitiva.
El consejero fue el último en tomar la palabra, después de un intenso debate entre los portavoces de los grupos parlamentarios, y resumió la postura del Gobierno para apelar a la responsabilidad de la oposición de cara a lograr la unanimidad en la votación incidiendo en los «beneficios» de esta normativa para la región. Señaló que no era «admisible» que el PSOE se amparara en el rechazo de sus enmiendas para no apoyar la necesaria actualización de la Ley puesto que también entendía que la anterior normativa había quedado claramente «obsoleta», mientras que la nueva «encaja» perfectamente con los intereses y circunstancias actuales de la comunidad autónoma.
Y es que Romaní recalcó que la norma fija un marco legal y garantiza la seguridad y libertad de los implicados en esta actividad lúdica, así como garantiza también la solvencia de los empresarios y los derechos tributarios para la Administración.
Pese a todo, durante la votación el PSOE solo se abstuvo en uno de los puntos, mientras que en el resto votó en contra, por lo que el PPsacó adelante la actualización de la Ley del Juego y Apuestas de Castilla-La Mancha pero sin la oposición de su lado.
reproches. La portavoz socialista en este asunto, Delfina Carrasco, no quiso dejar pasar la oportunidad de defender de nuevo sus enmiendas en sede parlamentaria, aún sabiendo que volverían a ser rechazadas como ya ocurriera en Comisión. No obstante, consideró que ayer la Ley del Juego no era precisamente lo más importante después de conocer la elevada cifra del número de desempleados, la cual recordaron desde la bancada socialista en multitud de ocasiones durante la sesión plenaria.
Asimismo, Carrasco reprochó al Grupo Parlamentario Popular que desde un principio dijera que podría llegar a un consenso con la oposición y luego en Comisión rechaza prácticamente todas las enmiendas socialistas.
Sin embargo, la portavoz del PP, María José Agudo, defendió la proposición de Ley por la necesidad de adecuarse a los nuevos tiempos y normativas y destacó sobre todo la apuesta por el «juego responsable» por parte del Gobierno.