La ONG Maná Ayuda al Desarrollo muestra a la gente que con un poco de colaboración y solidaridad es posible conseguir que muchas personas en Nicaragua, Mali o Bolivia, como ejemplo, vivan mejor. De nuevo se proponen un doble fin con su actividad Un día para la paz, que llevarán a cabo el 26 de septiembre, a partir de las 17 horas, en el parque de Abelardo Sánchez: acercar la realidad que viven todos los días las personas con discapacidad, y colaborar con un proyecto de desarrollo, este año en Nicaragua.
El evento, comentó la responsable de la actividad, Carmen García, «llevamos haciéndolo varios años, en colaboración con el Ayuntamiento de Albacete y la Diputación, y es una actividad de sensibilización dedicada a los niños, de infantil y primaria. Cada año Maná cambia el tema y todo lo que hacemos en esta jornada gira en torno a la discapacidad, con el título La voz de los dis-capacitados, con apoyo de Afaeps, Asprona, Frater, Aicclam, Asociación Desarrollo, Amiab, Aspas y ONCE, que han colaborado en esta labor de sensibilización, básicamente».
Recordó Carmen García que también «hay algo de recaudación, con la invitación a los niños a la merienda, para la que hemos contado con la colaboración de empresas de Albacete, por lo que a cambio de un pequeño donativo de tres euros, los pequeños participan en juegos, talleres y también meriendan, pasan toda la tarde con nosotros en esta actividad, a la que también están invitados sus padres y familiares».
El lema La voz de los dis-capacitados decía «ocupa en esta edición toda nuestra labor de sensibilización, y pensamos que hacía falta reconocer los derechos de las personas con discapacidad y utilizamos dis-capacitados, como aparece en todos nuestros carteles, porque las personas tienen muchas capacidades y, como ejemplo un ciego no ve, pero tiene otras capacidades igual o más desarrolladas, por eso son capacitados, porque tienen limitaciones, como todos las tenemos».
La jornada. La jornada que ha pensado la ONG Maná para el sábado, en el parque de Abelardo Sánchez, junto al colegio San Fernando, como es habitual, incluye la merienda y muchos juegos, «en los que también colaboran las distintas asociaciones -apuntó Carmen García- y los niños podrán seguir un circuito, en el que llevando un antifaz, se pondrán en el lugar de las personas ciegas, o tendrán que interpretar con lengua de signos, o leer los labios, como hacen las personas sordas y comprobarán las barreras con las que se encuentran los que tienen que ir con silla de ruedas en una ciudad. La idea es que a través del juego puedan ponerse en lugar de estas personas, para que sean más conscientes».
Recordó Carmen García que la fecha está expresamente elegida por la ONG Maná y «todos los años hacemos esto alrededor del último fin de semana de septiembre, cuando volvemos a la normalidad, una vez que ha pasado la Feria, aunque todavía no estamos muy metidos en el curso. Es una fecha muy buena y la actividad, todos los años, tiene muchísima aceptación, se nos llena el parque y creo que con más de 200 niños, seguro, puede que este año superemos esta cifra porque participan muchas asociaciones y de verdad, tiene mucho éxito. Proponemos una tarde solidaria, de paseo en el parque y por tres euros, menos de lo que cuesta una atracción de Feria, los niños pasan una jornada entretenida, en la que aprenden cosas y además meriendan. No sé qué más se puede pedir», terminaba la responsable.