La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) hacía público ayer el borrador definitivo sobre el nuevo Plan Hidrológico del Júcar (PHJ), que tendrá que ser aprobado en la reunión del Consejo del Agua prevista para mañana viernes y que incorpora la modificación en algunas de las alegaciones que se presentaron desde Albacete, desechando ahora la posibilidad de que el Ayuntamiento de la ciudad tenga que pagar porque los albacetenses beban agua del Júcar en tiempos de sequía.

En el borrador que se presentó en el mes de agosto, al que se pudo alegar hasta el pasado mes de febrero, y que generó diversas críticas desde colectivos como la Mesa del Agua, se recogía esa obligatoriedad que en su día quedó plasmada en el Convenio de Alarcón.

Ahora, con el documento definitivo, que con toda probabilidad verá la luz este viernes para seguir los trámites oportunos antes de ser aprobado por el Ejecutivo central, desaparece esa obligatoriedad, siendo el Estado el que se haría cargo de ese pago en el supuesto caso de una nueva época de sequía en la que Albacete necesitara para abastecimiento humano el agua del río Júcar.

Sobre este aspecto habían alegado tanto desde el Ayuntamiento de la capital como desde la Junta de Comunidades.

Aunque este no es el único aspecto en el que se tienen en cuenta las alegaciones planteadas desde Albacete.

El borrador definitivo del PHJ adelanta también ahora a 2015 el inicio de las obras para la prevención de avenidas provocadas por el río Balazote, por el Barranco de Escartana y para impedir la inundabilidad del Canal de María Cristina.

Cabe recordar que estas obras, tan demandadas en la ciudad de Albacete para evitar situaciones como las del verano pasado cuando se inundaron diversas urbanizaciones de la capital como consecuencia de las fuertes lluvias y el desbordamiento de estas infraestructuras, estaban previstas en el borrador inicial entre el año 2021 y 2027.

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