Capitán general de miles de soldados. Virtuales, pero soldados al fin y a la postre. De papel, pero soldados al fin y a la postre. Es un ejército único e irrepetible –amén de «invendible», cual deja claro su máximo jefe- del que puede presumir, y presume, Luis Reyes Blanc.
Este periodista y escritor albacetense los tiene en su domicilio madrileño y les pasa revista a diario, porque contarlos ni se le ocurre ni quiere saber el total de ellos: «¿Para qué? Si no se van a escapar», comenta con ese humor entre surrealista, crítico y críptico muy de Albacete que le ha caracterizado siempre y que ha llevado en su mochila virtual a lo largo de su carrera profesional.
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